Cerebros de la UMA

La experiencia en el aula y con el profesor, clave en el aprendizaje de los escolares

Investigadores de la Facultad de Ciencias de la Educación de la UMA han analizado el lugar simbólico y físico del docente en la relación pedagógica a través de los casos concretos de dos alumnas

Diego Martín Alonso, profesor del Departamento de Didáctica y Organización Escolar. | L.O.

Diego Martín Alonso, profesor del Departamento de Didáctica y Organización Escolar. | L.O. / María Lucía Rodríguez

María Lucía Rodríguez

El estudio desarrollado dentro del proyecto de i+D ‘Relaciones educativas y creación del currículum: entre la experiencia escolar y la formación inicial del profesorado. Indagaciones narrativas’ profundiza en el lugar que ocupa el docente en la experiencia educativa de sus alumnos a través de dos casos concretos durante los cursos escolares (2017-2018 y 2019-2020).

¿Qué has hecho hoy en clase?’ es la típica frase que los padres pronuncian cuando llegan a casa con sus hijos. Aunque, más allá de esos nuevos conocimientos que adquieren en el día a día, también están presentes las vivencias en el aula con los compañeros, el profesorado y la cultura que fomenta que el alumnado consiga sus logros, según el estudio.

Desde el inicio del siglo XXI nos encontramos en la ‘era del aprendizaje’, una perspectiva que, según el profesor del Departamento de Didáctica y Organización Escolar Diego Martín Alonso, deja de lado la experiencia de la relación del maestro y del alumno, como si esta fuese secundaria, o como si el estudiante aprendiera independientemente de este factor. «Los niños aprenden de lo que viven en sus clases. Ellos no entienden ni del BOE ni de las programaciones», explica.

Al contemplar que en los debates sobre la educación la presencia de los docentes era escasa, Diego Martín empezó a cuestionarse esta problemática. Observaba cómo las grandes instituciones o los políticos les indicaban a los profesores la manera de proceder aún siendo ellos los expertos. «Es necesario dejar a un lado esta visión macro para centrarnos de lleno en lo que ocurre en las escuelas», resalta.

Currículo/Experiencia escolar

Diego Martín Alonso, Nieves Blanco y Eduardo Sierra son los autores del artículo ‘La presencia pedagógica en la construcción de la relación educativa. El caso de una maestra de Educación Primaria’. En el mismo, se refleja que lo que realmente está en juego en las escuelas es el trabajo de los maestros ya que son los auténticos expertos. « El currículo escolar de Andalucía tiene unas 800 páginas que especifican toda la programación con un nivel de detalle que roza el absurdo. De esta forma, las profesoras se convierten en unas técnicas que aplican lo que ya se les ha dado, durante su formación, como si no fueran expertas. Y esto es totalmente contradictorio porque es como si le dices a un cirujano que cuando opere a corazón abierto que se lea un manual», resalta Diego Martín.

«Todos nos acordamos de una maestra que ha marcado nuestra vida. Eso ocurre por la experiencia educativa vivida en el aula»

Alisha y Hanna

En concreto, el estudio ha girado en torno a dos niñas de ocho años de tercero de Primaria, en el curso iniciado en 2017. Alisha y Hanna, procedentes de Ucrania y de India, visitaron a un maestro del Aula Temporal de Adaptación Lingüística (ATA) y trabajaron varias horas a la semana en un aula diferenciada con Clara, maestra de refuerzo y apoyo. «Una de ellas no entendía el español, por lo que estaba bastante perdida, sin embargo, cuando finalizó el estudio, la niña tenía 10 años y se encontraba completamente integrada en clase. Por lo tanto, este caso ilumina que lo establecido en el BOE sirve de poco si la profesora no se hubiera preocupado por ella y no hubiera distinguido cuáles eran sus necesidades», destaca Diego Martín.

Esta evolución se consiguió gracias a la ‘comprensión pedagógica’, es decir, entender lo que el menor necesita. A partir de ese clima de confort, el niño empieza a sentirse cómodo y a interactuar. «Cuando el alumno siente que un adulto se interesa por él, surge una relación que deja huella. Todos nos acordamos de una maestra que ha marcado nuestra vida», añade el profesor.

Metodología

El trabajo, publicado en ‘Teoría de la Educación. Revista Interuniversitaria’, se ha abordado desde la fenomenología hermenéutica y la indagación narrativa, utilizando como instrumentos de investigación las observaciones y las entrevistas. Se realizaron un total de 25 registros de observación con las niñas, 10 conversaciones hermenéuticas con la maestra y dos con las alumnas, estas últimas realizadas durante el segundo curso contemplado en la investigación.

Gestos docentes

La experiencia en la relación educativa les permitió distinguir tres gestos simbólicos que tienen una profundidad pedagógica: ‘invitar’, ‘estar ahí’ y ‘retirarse’. Según Diego Martín, ‘invitar’ significa que la relación la forman dos personas y que el aprendizaje no se puede controlar ni programar. Esta relación no solo depende de la maestra, sino también de que la otra persona esté dispuesta a transitar ese camino. Por otro lado, ‘estar ahí’ tiene que ver con el ‘cuidado pedagógico’: escuchar y comprender lo que cada niño va necesitando en cada momento para poder ofrecerlo. Y por último, ‘retirarse’, que está relacionado con asumir que si todo va bien, algún día ese alumno no necesitará al profesor y tendrá que saber echarse hacia atrás para que el niño evolucione por sí mismo.

Enseñanza

En la investigación educativa, no se debe dirigir la atención solo al proceso de aprendizaje, sino también a cómo se va desenvolviendo el docente en esa experiencia. «Yo empezaría a reflexionar sobre la enseñanza. El aprendizaje no lo podemos controlar, pero sí que podemos comprobar cómo los docentes nos disponemos en la relación: si escucho, si me implico en preparar las tareas…», concluye Diego Martín.