Ampas de Guadalmar y sindicatos protestan contra el cierre de líneas en colegios públicos

El anuncio, por parte la Delegación de Educación de Málaga y la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía, que establece la eliminación de las líneas de tres años en distintos colegios públicos andaluces, ha desatado las protestas de los colegios de la ciudad. 

Esta mañana, desde las asociaciones de padres y madres de alumnos (AMPAS) Nueva Guadalmar, del CEIP Julio Caro Baroja; se ha llevado a cabo una concentración a las puertas del colegio para reivindicar su postura en contra de esta decisión educativa. En esta protesta, el AMPA denuncia que en "pleno proceso de escolarización, la Junta de Andalucía ha decidido quitar una de las dos líneas de tres años, subiendo el ratio de las aulas", y reiteran que "a los padres y madres se les ha quitado el derecho de libre elección del centro". A esta concentración ha acudido la Asociación Vecinal de Guadalmar, Almar, grupos municipales de PSOE y Adelante Málaga, Verdes Equo Málaga, CCOO y CGT. 

La decisión de cerrar estas líneas educativas se deben, según ha explicado Mayte Martín, presidenta AMPA Nueva Guadalmar, "a la baja cifra de natalidad": "Esta es la excusa que ponen, las familias no estamos de acuerdo con esta decisión, puesto que sería un buen momento para bajar la ratio de forma natural y mejorar así la educación", afirma Martín.

En Málaga se producen más de 50 líneas de educación para niños de tres años, pero esta decisión de la Junta de Andalucía provocará que "varios niños se queden sin su colegio de referencia y se verán obligados a irse a otro".

Los padres y madres alegan que esta decisión se toma en mitad del proceso de escolarización, y supone una "vulneración del derecho de libre elección de centro por parte de las familias, ya que los alumnos y alumnas que soliciten nuestro centro serán reubicados".  En el CEIP Julio Baroja, existen 23 matriculaciones como primera opción de escolarización y más de 62 familias lo han solicitado como segunda opción.

Pero este colegio no es el primer afectado en la provincia, ya la semana pasada las Ampas de Torremolinos protestaron en contra de esta decisión, que afectaba al CEIP Ciudad Palma de Mallorca y que ahora se ha trasladado al CEIP El Pinillo.

"La distribución de las unidades en los centros educativos se establece en función a las necesidades reales, en lugar del número de líneas que tengan", dicen desde la Delegación de Educación de Málaga. Y aseguran que "el objetivo principal para el próximo curso es tener una bajada efectiva en la ratio. Esto quiere decir, que las unidades se distribuirán en los niveles educativos y/o los centros para llegar a ese fin", subrayan.

Martín ha criticado que con estas decisiones "se merma la calidad de la educación pública, ya que en la privada no se están suprimiendo estas líneas educativas". Y esto genera desigualdades entre ambos modelos educativos: "Con esto, se obliga a los padres a optar por colegios concertados o privados ya que no tienen esta problemática", aclara la presidenta del AMPA.

Por otro lado, Mayte Martín denuncia que "el aula que se mantenga contará con 28 o 29 alumnos, por lo que un docente no puede dar una educación de calidad así". "La educación es una libertad y un derecho". Otra de las consecuencias de este cierre, será la pérdida de personal docente y de recursos: "Si cada año se cierra una línea, los maestros también perderán sus puestos si cada vez hay menos alumnos", dice.

Por ello, tanto sindicatos como Ampas piden "mantener las dos líneas, ya que supondría una bajada de ratio, dejando de sobrecargar a los docentes, prestando una mayor atención al alumnado y mejorando su educación".