Urbanismo

Los vecinos de Martiricos: “En la zona hacía falta un parque así”

Los habitantes del barrio malagueño están contentos con la apertura del nuevo área de recreo, sobre todo porque “es muy importante para los más pequeños”

Ana L. Moreno

Hace algunos años la barriada de Martiricos no era lo que es hoy. Los antiguos terrenos abandonados de la fábrica de Citesa ocupaban lo que ahora es un parque verde de casi 31.000 metros cuadrados. Los vecinos necesitaban ya un parque, un pequeño pulmón urbano que diera otros aires al barrio. Además de estar habitado por niños, al contar con un pequeño jardín infantil, en el parque ya pueden verse a runners, ciclistas, personas con perros, abuelos paseando con sus nietos y grupos de amigos. También sirve como punto de conexión para los viandantes que quieran cruzar desde Avenida del Doctor Marañón al Paseo de Martiricos, y viceversa.

El parque tiene una extensión de casi 31.000 metros cuadrados, con zonas de esparcimiento y de paseo. Está situado en el distrito Palma-Palmilla y fue inaugurado el pasado lunes por el alcalde, Francisco de la Torre, y el edil de Urbanismo, Raúl López. Este proyecto se enmarca entre las viviendas de VPO y cuenta con 254 bancos y más de 250 árboles que dan sombra a sus visitantes. El estreno de este jardín no ha dejado indiferente a nadie.

Vista de Paseo de Martiricos y parte de la entrada del parque

Vista de Paseo de Martiricos y parte de la entrada del parque / Ana L. Moreno

Un anciano pasea con su nieto mientras recuerda con cierta nostalgia que “cuando era chiquillo jugaba al fútbol aquí, quedábamos los sábados y le llamábamos la parcela”, añade que le gusta mucho el resultado ya que puede ser un espacio para los jóvenes. El señor vive al otro lado del río, por lo que este parque no solo tapa un hueco en las necesidades de los habitantes de Martiricos, sino también de sus barrios aledaños como son La Goleta, Segalerva o la Trinidad.

Para las personas con mascotas el parque también trae beneficios, algunas aprovechan su paseo para salir con el perro. Un vecino menciona algo que le ha llamado la atención: “me parece mal que esté vallado por un lado y por otro no, es la primera vez que entro y eso es raro”. Lo cierto es que los parques malagueños de este tipo como el de Huelin o el de San Rafael suelen estar totalmente cercados para poder cerrarlos cuando cae la noche. Se desconoce si el amurallamiento se completará en algún momento, aunque sería interesante para su propia protección.

Interior del parque Martiricos

Interior del parque Martiricos / Ana L. Moreno

Una señora se protege del sol en uno de los bancos y comenta que “está muy bien, tiene zonas verdes, suficientes bancos y algo de sombra para sentarse, también se puede caminar un buen rato, vivo cerca y vendré a menudo”. “Para los más pequeños es bien importante, porque tiene un parquecito y pueden divertirse y pasar el rato. Hacía falta en la zona un parque así como este”, concluye la vecina. 

Otro de los públicos objetivos que tiene este reciente parque son los grupos de amigos jóvenes. Algunos adolescentes explican que ya están empezando a quedar en el parque “porque está más nuevo, los demás que hay no son tan grandes, ni bonitos y además están estropeados y rotos”. “Se lo han currado mucho”, para los chicos este parque es distinto y menos aburrido, tiene de todo, cierran diciendo que “igual cuando llevemos un año pasando por aquí también nos hemos cansado, pero ahora simplemente es la novedad”.