Testimonio

Abroncan a la malagueña confinada en Sicilia por denunciar su situación en redes sociales

Laura Cabello relata cómo los responsables de la organización le recriminaron que estaba bien alojada y que si no le gustaba que "se fuera a un hotel de lujo"

Laura Cabello, en la habitación del hotel supuestamente medicalizado.

Laura Cabello, en la habitación del hotel supuestamente medicalizado. / L.O.

Ana I. Montañez

Ana I. Montañez

Poco ha cambiado la situación de Laura Cabello, la malagueña de Alhaurín de la Torre confinada en un hotel casi abandonado de Sicilia tras dar positivo en Covid-19 un día antes de coger el vuelo de regreso a casa. Ayer unos conocidos que viven en la región italiana se acercaron al hotel a traerle productos de higiene personal y de limpieza, ya que quienes la custodian le comunicaron que debería encargarse de adecentar su habitación porque no tenían servicio para ello.

Finalmente hoy han entrado a limpiar su cuarto pero, más allá de eso, su situación no ha variado, según cuenta a este periódico. De hecho, ayer el responsable del supuesto hotel medicalizado acudió a su encuentro y la abroncó por exponer en sus redes sociales el estado en el que se encontraba -suciedad, toallas polvorientas, camas sin colchones... y, además, la presencia de cucarachas en el interior del alojamiento- y el trato que había recibido, al no recibir ningún tipo de información más allá de le transmitió el sanitario que vino a comprobar su estado después de pasar la primera noche.

Los conocidos de Laura en Sicilia le han traído productos de higiene y limpieza al hotel.

Los conocidos de Laura en Sicilia le han traído productos de higiene y limpieza al hotel. / L.O.

Según ha explicado esta enfermera veterinaria malagueña, el organizador, en conversación con una de sus amigas que habla italiano, le recriminó que estaba bien alojada y que, si no le gustaba, que "se fuera a un hotel de lujo". En sus redes sociales ha contado que incluso venían de camino los Carabinieri, efectivos de la policía italiana, aunque finalmente no entraron, al parecer, porque no tenían EPI.

Esta malagueña debía haber cogido el vuelo de regreso a Málaga este martes pero, tras dar positivo en dos test de antígenos y una prueba PCR, -pese a que pasó el coronavirus en agosto del año pasado- tuvo que quedarse en tierra. El miércoles fue trasladada a un hotel supuestamente medicalizado en condiciones insalubres, sin equipamiento sanitario alguno y con agua corriente fría y sucia que le ha irritado la piel. Desde el Consulado de España en Palermo le han retransmitido que se asegurarán de que recibe asistencia médica aunque poco más se puede hacer, esgrimiendo que la "situación en Italia es así".