Turismo

Málaga recupera el 80% de su afluencia turística pero con cifras aún en niveles de hace más de una década

Ha recibido en verano 1,5 millones de viajeros hoteleros, con una subida del 136% sobre 2020 y una caída del 21% en relación a la prepandemia - El visitante nacional ha salvado la temporada - Esperan la normalización para 2022

Llegada de turistas internacionales al aeropuerto de Málaga

Llegada de turistas internacionales al aeropuerto de Málaga / Álex Zea

José Vicente Rodríguez

José Vicente Rodríguez

El sector turístico de Málaga ha recuperado este pasado verano buena parte del flujo de visitantes perdidos durante la época de pandemia, alcanzado ya un 80% de las cifras récord de turistas firmadas en el año 2019, es decir, en el último ejercicio de actividad normalizada. La provincia ha registrado en este 2021, de junio a agosto, un total de 1,5 millones de viajeros hoteleros, lo que supone un aumento del 136% respecto al desastroso año 2020 y un 21% de caída en relación a la época de la prepandemia. En cuanto a las pernoctaciones hoteleras, el verano ha dejado 5,2 millones de estancias, con una subida del 170% sobre 2020 y un descenso del 30% en relación a 2019. Las cifras, eso sí, mantienen a la Costa del Sol en cotas de actividad propias del año 2010. Por decirlo gráficamente, la pandemia ha hecho retroceder a Málaga más de una década en cuanto a afluencia turística hotelera, aunque se confía en que lo peor de esta crisis sanitaria y su derivada económica hayan quedado definitivamente atrás y den paso ahora a una rápida recuperación.

El presidente de Turismo Costa del Sol, Francisco Salado, ha señalado este viernes en la presentación del informe "Balance de Verano 2021" que las cifras han sido "mucho mejor" de las esperadas y ha manifestado su confianza en que para 2022 la industria turística pueda recuperar ya sus niveles previos al estallido del Covid.

"La recuperación de la Costa del Sol se ha iniciado ya con todas las garantías. Nos estamos despertando de esta pesadilla que hemos vivido y tenemos la certeza de haber dejado atrás lo peor de la pandemia", ha afirmado Salado, que ha mandado un mensaje de "optimismo" al sector. "La provincia camina ya a velocidad de crucero y pronto volveremos a la ansiada normalidad, que buena falta hace tanto a las empresas como a los empleados del sector. Soy optimista, pero también realista", ha añadido. El turismo es la actividad directa en Málaga para más de 14.000 empresas y 117.000 trabajadores.

En total, la provincia ha recibido entre junio y agosto a 1,9 millones de visitantes, de los 1,3 han sido turistas nacionales y 628.000 extranjeros. El segmento nacional se ha convertido así en la verdadera tabla de salvación del verano, con un alza del 105,9% sobre 2020 y superando también las cifras prepandemia (aumenta un 27,3% respecto a 2019). El visitante foráneo, aunque también ha aumentado muchísimo sobre el aciago ejercicio de 2020 (la subida es del 165,6%), todavía presenta unas cifras un 58% inferiores a las de 2019. "El turista nacional ha salvado el verano. Agradecemos esa apuesta de responsabilidad y solidaridad", ha comentado.

Salado se ha mostrado convencido de que la normalización de la actividad turística en la provincia no tendrá que aguardar a 2023 sino que se producirá ya a lo largo del próximo ejercicio debido a su especial pujanza en este segmento. En este verano de 2021, la cifra total de pernoctaciones (sumando los 5,2 millones de estancias hoteleras otros 2,2 millones de alojamientos no hoteleros) ha sido de 7,4 millones, con un incremento del 135% sobre 2020 y un descenso del 31% con respecto a 2019. Las cifras, en este caso, reflejan también valores propios de hace más de una década.

Francisco Salado, en la presentación del balance de verano de Turismo Costa del Sol.

Francisco Salado, en la presentación del balance de verano de Turismo Costa del Sol. / La Opinión

En el caso concreto de los hoteles, el nivel se retrotrae incluso a más atrás (2004), aunque Salado recuerda que las circunstancias de oferta de ambas épocas no son comparables, ya que ahora ha irrumpido en el mercado la nueva modalidad de viviendas turísticas y su canalización a través de plataformas digitales. El turismo extrahotelero en Málaga, con 482.000 viajeros este verano, ha subido sus pernoctaciones un 81% sobre 2020 y sigue un 33,1% por debajo de 2019.

En todo caso, Salado ha invitado a no centrarse demasiado en las cifras ya que, según ha afirmado, la estrategia a futuro del destino Málaga-Costa del Sol debe pasar más por la calidad en el flujo de visitantes y no por la cantidad. "Hay que buscar la rentabilidad, un mayor gasto medio por turista y estancias mas largas. No podemos crecer eternamente en número de visitantes. Queremos centrarnos en una oferta de calidad, en un turista con nivel de ingresos medio-alto que sea más rentable. El objetivo es que vengan los turistas necesarios para mantener el nivel de empleo y los hoteles. Buscar que estén más tiempo y gasten más", ha afirmado.

El también presidente de la Diputación Provincial ha destacado la buena afluencia de llegadas de visitantes a través del aeropuerto de Málaga, con 2,3 millones de pasajeros durante el verano (suben un 172% en relación al año pasado pero aún están un 46% por debajo de la prepandemia). De ellos, 515.000 fueron viajeros nacionales, que se sitúan ya sólo a un 8,3% de distancia de los guarismos de 2019, y 1,8 millones internacionales, con un descenso sobre la era preCovid aún del 46%.

Para el periodo octubre-diciembre hay una previsión de 2,1 millones de plazas en el aeropuerto malagueño, lo que equivaldría a recuperar el 90% de las que había disponibles en 2019. "Es una nueva señal de optismismo", ha dicho. De ellas, 480.000 son para británicos, otras 400.00 para turistas nacionales y 150.000 para alemanes. Entre estas tres nacionalidades suman el 50% del total. Salado ha resaltado también la importancia de mercados como el francés, el holandés, el belga o los países nórdicos. Turismo Costa del Sol realizará una treintena de acciones promocionales de aquí a que acabe el año y entre ellas, claro está, se incluye la asistencia a la World Travel Market (WTM) de Londres.

El postbrexit es un elemento clave en el panorama turístico y el objetivo de Málaga, a corto plazo, es recuperar y reforzar la afluencia de británicos, además de seguir manteniendo los buenos datos de afluencia del turismo nacional. Salado no teme que en 2022 pueda producirse un significativo descenso de visitantes españoles a la Costa del Sol una vez que la vía para irse de vacaciones al extranjero se normalice. "Sabemos que el turista nacional no ha viajado este año fuera por motivos de seguridad sanitaria pero esperamos seguir contando con ellos. Y en cualquier caso, si hay una bajada, se compensará con la subida de extranjeros", ha explicado.