Empresa pública de limpieza de Málaga

Limasam instalará en 2022 el quinto contenedor para restos orgánicos

Así se recoge en los presupuestos, de forma que se reserva una partida de 2,94 millones

Un usuario deposita una bolsa en un contenedor de restos orgánicos.

Un usuario deposita una bolsa en un contenedor de restos orgánicos. / F. GIMENO

José Antonio Sau

José Antonio Sau

La ciudad de Málaga va a contar, durante el año 2022, con un quinto contenedor de color marrón, posiblemente, para la recogida de restos orgánicos, algo que se ha producido, por ejemplo, este mismo mes en Vélez-Málaga, capital de la Axarquía. Así se recoge, al menos, en los presupuestos de la sociedad pública de limpieza de Málaga, Limasam, a los que ha tenido acceso este periódico.

De esta forma, entre los objetivos a alcanzar en 2022 se informa de «la implantación del quinto contenedor: continuar ampliando el alcance/capilaridad de la recogida separada de la materia orgánica en la totalidad del municipio de Málaga». Asimismo, se aspira a aumentar la recogida separada: «Con la implantación del quinto contenedor, se va a realizar una remodelación a nivel de la ciudad en lo que afecta a la contenerización. Dicha mejora afectará directamente a los trayectos en los recorridos de recogida, con lo que esperamos incluir la recogida de carga lateral a izquierdas. Este hecho, junto con la inclusión del quinto contenedor, prevemos que suponga una reducción de impropios en las recogidas separadas».

Así, se prevé ejecutar una instalación específica para el tratamiento de los biorresiduos recogidos separadamente. La implantación «del quinto contenedor en el municipio supondrá la necesidad de gestionar un nuevo flujo de residuo (biorresiduo). Para su tratamiento, se ha previsto una nueva línea de tratamiento, que clasifique y mezcle el biorresiduo con material estructurante para la producción de compost de calidad».

Ello irá acompañado de inversiones destinadas a la contenerización de la ciudad. «La implantación del quinto contenedor requiere de una importante inversión en aras a disminuir el impacto visual de la ciudad, cambio que va a ser aprovechado con la política de sustitución del parque de contenedores que hay en Málaga, mejorando notoriamente el aspecto del entorno urbano del municipio. El importe de la inversión es de 2,.941.250 euros». Esta operación, por cierto, está cofinanciada con ayudas europeas para el quinto contenedor.

El presupuesto total de Limasam, este año, ronda los 120 millones de euros. Es ya una empresa absolutamente pública.

Lo que debe depositarse en este contenedor son restos de alimentos como pieles de frutas, espinas de pescado, plantas, cáscaras de huevo o posos; o servilletas y papel de cocina usados.

Por cierto, el concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Vélez-Málaga, Antonio Ariza, presentó el pasado día 12 de noviembre los nuevos contenedores para restos orgánicos, una acción que se enmarca dentro del proyecto del implantación del conocido como quinto contenedor y que se encuentra ya en su tercera fase. El edil de Medio Ambiente recordaba que «las dos primeras fases han sido informativas, llevando a cabo diferentes campañas entre vecinos».