«Picasso se mueve, Picasso se transforma» es el lema que representa la filosofía del Instituto Pablo Picasso de Nueva Málaga, que ha sido este mes el anfitrión en un nuevo encuentro internacional entre estudiantes europeos convocado por el programa Emprendimiento en la escuela de la Unión Europea. Esta iniciativa tiene el objetivo de promover el ánimo emprendedor entre los estudiantes, así como la convivencia con distintas culturas que les permitan ganar competencias para su futuro profesional.
La participación del centro malagueño en los programas Erasmus+, subvencionados por la Comisión Europea, viene siendo habitual desde hace años, pues su equipo docente está comprometido con la idea que defiende su directora, Reyes López: «Es trabajar algo que haces normalmente pero orientado a otra cosa diferente (...) que no nos limitemos simplemente a lo que sale en el libro».
El interés de los alumnos por trabajar en nuevas iniciativas como esta también se vislumbra. Es el caso de Ana Aragón, estudiante de segundo de Bachillerato que ha participado en el encuentro internacional con otros compañeros de su curso: «En clase aprendes mucha teoría pero el Erasmus es tan práctico que te tienes que meter de lleno. Abres mucho los ojos porque ves lo que es el mundo adulto, el mundo de verdad».
Emprendimiento en la escuela fue un programa en el que el profesorado del centro se embarcó en el año 2019. Presentaron la iniciativa a los estudiantes de cuarto de la ESO, quienes tuvieron que escribir una carta de motivación y un currículum para poder ser seleccionados como participantes.
Fue entonces cuando surgió Aliquindoi, una aplicación para promover las visitas a los monumentos de la capital. Así lo relata la profesora de inglés y coordinadora del programa Erasmus, Laura Moreno: «El diseño de una aplicación para poner en valor monumentos malagueños desde el punto de vista del alumnado y de la familia del alumnado de nuestro centro».
Sin embargo, la Covid-19 les obligó a «renovarse»: «Con la pandemia tuvimos que reformular lo que estábamos haciendo y eligieron investigar sobre cómo diseñar una empresa para ofrecer visitas culturales en Málaga sobre todo online», narra la docente.
El proyecto y las clases
El trabajo en el proyecto se ha compaginado con las clases, sobre todo las de inglés y economía, aunque no ha sido una tarea fácil. Los alumnos que comenzaron con su diseño de empresa en cuarto de la ESO, ahora están en segundo de Bachillerato preparando la inminente prueba de acceso a la universidad, la EBAU.
«A mi me daba un poco de miedo que por el tema de centrarme en el proyecto Erasmus me quedase un poco atrás en las otras asignaturas», explica la alumna Lucía Fernández. Sin embargo, con la implicación de los profesores y los estudiantes, el encuentro celebrado entre el 10 y el 15 de enero con 20 alumnos de Polonia, Grecia, Letonia e Italia ha supuesto un gran aprendizaje. «Yo creo que hemos aprendido mucho de la experiencia, el hecho de conocer a gente de otros países, conocer un poco su cultura y obviamente lo de hablar en inglés todo el rato nos ha ayudado un montón», defiende Lucía.
Las actividades acercaron también a los empresarios noveles de la ciudad que cuentan con iniciativas sostenibles, como es el caso de la tienda de artesanía Caramba. Según la profesora Laura Moreno, «ayudó a aportar otra visión del emprendimiento». En definitiva «una dinámica diferente» que motiva a los alumnos.