8M en Málaga: Miles de malagueñas reivindican igualdad por el Día de la Mujer

Tras dos años de pandemia, las calles volvieron a llenarse este martes con miles de malagueñas. El morado inundó Málaga, con motivo del Día Internacional de la Mujer. Un color con el que las mujeres de la provincia salieron a reivindicar igualdad. Un 8M, que a pesar del parón por la crisis sanitaria, grita igual: «Nunca nos hemos ido, a pesar de la pandemia. Luchamos cada día contra la desigualdad, pero hoy gritamos para que el mundo nos escuche», comentaba una manifestante. 

Según la organización, al inicio de la marcha, en la que también hubo un recuerdo para Ucrania, había «unas 8.000 personas», mientras que la Policía Nacional cifró en «unos 5.000» los participantes casi una hora después de comenzar.

La manifestación partió a las 19.00 horas de la Alameda de Colón y siguió por Alameda Principal, calle Larios, Granada, plaza del Siglo y Molina Lario. La protesta feminista recorrió las principales avenidas de Centro Histórico durante dos horas, bajo un mantra que se repetía continuamente: «Aquí están, ellas son, las de la revolución».  

Un grito desesperado que no cesa en la lucha femenina por los derechos de la mujer y la igualdad de oportunidades dentro de la sociedad. Una veintena de peticiones recogidas en el manifiesto de la Coordinadora 8 de marzo que buscan erradicar todas aquellas prácticas machistas presentes en la sociedad. Como las continuas condenas de la otra gran pandemia: la violencia machista y el acoso sexual. 

En 2021 fueron asesinadas 43 mujeres y en 2022 son ya 10. Además, hubo 2.143 agresiones sexuales denunciadas. Unas escalofriantes cifras de las que se hacen eco y denuncian miles de malagueñas en este 8M: «No son muertas, son asesinadas», gritaban al unísono.

Peticiones que también se materializaban en los cientos de pancartas: «Sola o borracha quiero llegar a casa», «No quiero tus piropos, quiero tu respeto» o «Lo contrario al feminismo es la ignorancia», eran algunos de los mensajes que se podían leer. 

El miedo de volver solas de noche, la precariedad laboral, la brecha salarial y la falta de corresponsabilidad son algunos de los temas que condenó esta marcha. 

Una manifestación que se bifurcaba, bajo el lema «El Feminismo es abolicionista», por parte de la Plataforma 8M y que reivindicaba la abolición de la prostitución, entre otros asuntos: «Exigimos una ley de abolición de la prostitución que ampare a las mujeres, además de una educación afectivo sexual y el acceso de todas las mujeres a sus derechos sexuales y reproductivos y a la interrupción voluntaria del embarazo dentro del sistema público de salud», denuncia la plataforma. 

Málaga reivindica el 8M con actos por toda la provincia

Polémica por la Ley Trans

La Ley Trans fue otro de los temas protagonistas en la marcha: «El feminismo incluye a todas las mujeres, también a las trans. El feminismo no es transfobia», subrayaban algunas de las manifestantes. Sin embargo, el manifiesto oficial recogía una postura contraria a la Ley Trans. «Exigimos la retirada de los anteproyectos de ley y leyes en vigor de autodeterminación jurídica y registral del sexo inspirados en la teoría Queer, y la realización de una evaluación de impacto sobre los derechos de las mujeres».

De hecho, este punto ha llevado este año a que haya manifestaciones diferenciadas en ciudades como Sevilla o Madrid.

El manifiesto de la Plataforma 8M exigía, además, «que acabar con las violencias machistas es una cuestión vital, que afecta a la calidad democrática de nuestro país. En 2022 han sido asesinadas 10 mujeres. La violencia machista ha asesinado desde 2003 a 1.140 mujeres según fuentes oficiales». 

Desde la plataforma exigen «acabar con la violencia institucional contra las mujeres eliminando los prejuicios y estereotipos sexistas vigentes tanto en el sistema judicial como sanitario». 

En la marcha tampoco faltaron las mascarillas, eso sí moradas. 

A pesar de los múltiples mensajes y divisiones, el objetivo de la marea violeta es erradicar los comportamientos machistas y conseguir una igualdad económica y social. Mujeres reivindicativas que piden tener una sociedad igualitaria.