El Instituto Andaluz de Criminología avanza en su internacionalización

El Instituto de Criminología de Málaga cumple 33 años desde que se instauró en Málaga y vive un buen momento de proyección internacional y visibilidad que le permitirá ser anfitrión en septiembre del 22 Congreso Europeo de Criminología.

Empezaron a trabajar como instituto interuniversitario en sus primeros años hasta que evolucionó a lo que es ahora. Como su nombre indica, la idea surge por parte de diferentes catedráticos de Derecho Penal de distintas universidades andaluzas que, interesados por la criminología, decidieron formar un instituto universitario.

Originalmente contaba con cinco secciones diferentes hasta que Córdoba decidió desvincularse del mismo, así que quedaron las otras cuatro: Málaga, Sevilla, Cádiz y Granada. «Seguimos funcionando desde entonces con nuestras reuniones periódicas y apostando por la criminología», explica Anabel Cerezo, directora del Instituto de Criminología de Málaga desde 2017.

Las secciones de todas las universidades empezaron entonces a ponerse de acuerdo para poner en marcha un título de experto en Criminología, que antes no existía en España. Anabel Cerezo, por ejemplo, pertenece a la primera promoción de expertos que salió de ese primer título.

Es entonces cuando el Ministerio de Educación empieza a interesarse por la idea de que este título pase a ser un grado universitario. Aunque el título tuvo que desaparecer después de poner en marcha el nuevo rumbo que iba a tomar la criminología en España, Anabel Cerezo asegura que «están muy vinculados al grado», ya que han contribuido en la elaboración de planes de estudio, la coordinación y, además, están dando clase.

Colaboración entre países

Desde el punto de vista de la sección de Málaga, el instituto ha ido abriéndose para ser más conocido no solo a nivel nacional, sino también de una manera más internacional en los últimos años.

Al comienzo del funcionamiento del instituto se forma al personal de los servicios de asistencia a las víctimas de Andalucía (SAVA), con los que a día de hoy comparten diversos proyectos.

En los últimos años han dado un paso importante a nivel internacional, y prueba de ello es la celebración del Congreso Europeo de Criminología. «No queremos decir que es el culmen del instituto, porque no queremos quedarnos aquí, pero sí que es la consecuencia de todos estos trabajos que llevamos haciendo de relaciones más internacionales», destaca la directora.

El Instituto de Criminología cuenta ahora mismo con una plantilla fija, en la que se enmarcan unos 16 profesores, además de una plantilla temporal.

Entre sus proyectos, hay un importante volumen a nivel internacional. Entre ellos, se encuentran, por ejemplo, la colaboración en la realización de un informe sobre feminicidios que se producen en México, donde la propia directora fue contratada por las Naciones Unidas. También trabajan en temas de inmigración, turismo y seguridad, violencia en el deporte, victimología, criminología ambiental, mujeres y sistema penal o ciberdelicuencia, y tienen proyectos internacionales con profesionales de otras universidades.

«En temas de inmigración tenemos un proyecto de inmigrantes, ‘Police Stop’, que analiza cómo la policía trata a los inmigrantes y yo tengo uno sobre Culturist of Victimology, que es la victimología cultural. Tenemos proyectos europeos y proyectos bilaterales con otros organismos a nivel internacional», explica Anabel Cerezo.

El Instituto de Criminología se encarga de diseñar el plan de estudios del grado que existe en la UMA actualmente, reuniéndose a nivel autonómico para definir las asignaturas y los temas que deben ser comunes en todos los grados de Criminología de Andalucía. «El decano siempre nos tiene en cuenta como personas expertas en criminología para todos los cambios y para poder mejorar el grado», cuenta la directora del Instituto y catedrática de la UMA.

Además, procuran formar parte de la coordinación, por ejemplo, integrando a miembros de su equipo como coordinadores de TFG o del grado en sí.

Gran interés por el grado

El grado de Criminología es una carrera que despierta mucho interés entre los jóvenes, como indica la alta nota de corte que se precisa para acceder al mismo.

Según Anabel Cerezo, encontramos tres perfiles distintos de alumnos en el grado: aquellos que tienen interés policial y se sacan el grado para que les resulte más sencillo acceder a oposiciones como inspectores (ya que la mayor parte de los contenidos que se dan en el grado son los que entran en los exámenes de estas oposiciones); un perfil más social, que quiere trabajar en la prevención de la delincuencia; y, por último y más minoritarios, aquellos que quieren trabajar en prisiones y que luego hacen sus oposiciones para poder entrar en el ámbito penitenciario.

Algo muy positivo de este grado es que es muy internacional. «Tengo algunos alumnos que terminan aquí el grado y luego se van a hacer un máster a cualquier universidad europea o americana, incluso han llegado a irse a Australia» explica esta profesora de Derecho. «Allí sí que tienen puestos de trabajo definidos para criminólogos», añade.

Series como la famosa CSI han hecho que muchos alumnos lleguen allí ante la curiosidad que les da trabajar como en la ficción, pero «se les pasa pronto en el momento en el que ven de que va la carrera», comenta Cerezo. De hecho, el contenido de este tipo de series lo ven en una asignatura en toda la carrera de Criminología. Es aquí cuando se dan cuenta de que la criminología es mucho más. «La formación es muy exhaustiva y necesitan saber de muchas cosas al mismo tiempo ya que es interdisciplinar: tienen que saber de mucho para luego poder aplicarlo en su profesión», concluye.