Ciudad Jardín

Las cuentas pendientes en Cortijillo Bazán

La Asociación de Vecinos de Cortijillo Bazán reclama que Emasa se haga cargo de todas las averías en la vía pública y que las zonas del barrio privadas de uso público sean recepcionadas. También piden mejoras en zonas verdes y un plan de baldeo para quitar la calima

Avería de saneamiento en mitad de calle Quiteria cuya reparación costean los vecinos.

Avería de saneamiento en mitad de calle Quiteria cuya reparación costean los vecinos. / A.V.

Alfonso Vázquez

Alfonso Vázquez

En Cortijillo Bazán, en las alturas de Ciudad Jardín, la asociación de vecinos se solidariza con un bloque de calle Quiteria que debe pagar 9.000 euros por un escape de aguas fecales en mitad de la vía pública. Se da la circunstancia además de que el bloque acaba de pagar un ascensor.

«La carretera empezó a hundirse en julio del año pasado y cada vez se ha ido rompiendo más. Emasa dijo desde el principio que era una injerencia del edificio», explica Paco Nájera, presidente de la asociación de vecinos.

Para el colectivo vecinal debe cambiarse esta normativa «en toda Málaga» con el fin de que toda avería de este tipo en la vía pública la costee Emasa y no los vecinos, recalca Paco Nájera.

El muro agrietado también deben arreglarlo los vecinos.

El muro agrietado también deben arreglarlo los vecinos. / A.V.

La asociación de vecinos tampoco está satisfecha con que el Ayuntamiento no haya recepcionado toda la barriada y todavía haya calles o zonas «que son privadas pero de uso público y cualquier reparación tienen que costearla los vecinos». El presidente vecinal muestra las grietas de un murete que, informa, no corresponde arreglar al Ayuntamiento. «Qué hacemos entonces, le ponemos rejas a la barriada?», señala, al tiempo que destaca que Cortijillo Bazán incluye también todo el entorno y no sólo el barrio.

Tampoco ha gustado la proliferación de nuevas barandillas en muchos rincones del barrio, algo que en opinión de la asociación impide el tránsito cómodo por las calles, cuando la petición del colectivo había sido «poner rebajes, no barandillas», dice el presidente, mientras una vecina ironiza: «Con tanta baranda parece que van a soltar una vaquilla».

Los vecinos también muestran a La Opinión un chopo que creen que está seco, junto al aparcamiento terrizo de calle Lágrima. «Y los otros se han salvado porque un hombre les echaba un cubo a cada uno», cuenta un vecino.

Restos de un árbol y matorral seco junto al parking de calle Lágrima.

Restos de un árbol y matorral seco junto al parking de calle Lágrima. / A.V.

Detrás de los chopos, por cierto, asoma una terraplén de matojos secos y algún tronco caído que desciende hasta enlazar con el parque de San Telmo. Los vecinos piden que se arregle. «Puede que lo limpien una vez al año y es un foco de incendios», advierte el presidente vecinal.

Pista multideportiva

Muy cerca de este espacio se encuentra la pista multideportiva del barrio, que continúa con los mismos problemas que cuando La Opinión la visitó a finales de 2019: No hay luz desde 2006 ó 2007, tampoco redes de las porterías «y la verja principal tiene muchas barras pletinas desoldadas con lo cual impactan los balones y el ruido se multiplica», resume el presidente.

Detrás de la pista, por cierto, a un aliviadero del parque de San Telmo asoma un hilo de agua procedente de las instalaciones deportivas que se estanca y llena de mosquitos, cuenta Pedro Muñoz, un vecino.

Los vecinos piden un plan de baldeo para quitar la calima.

Los vecinos piden un plan de baldeo para quitar la calima. / A.V.

Por último, la Asociación de Vecinos de Cortijillo Bazán pide para el barrio un plan de baldeo que elimine la calima caída en marzo. «Me puedo equivocar, pero en lo que va de año no ha habido baldeo y ya con las calores, barro aparte, se empiezan a notar los malos olores cerca de los contenedores de todo tipo de basura», critica Paco Nájera.

Respuesta del Ayuntamiento

La concejala de Sostenibilidad Medioambiental, Gemma del Corral, explicó ayer que por normativa municipal desde una vivienda o bloque hasta la conexión de la red general «aun siendo vía pública» se considera injerencia particular «y al día de hoy no tenemos intención de modificar la normativa». Entre otras cosas, subrayó la concejala, por los altos costes que soporta Emasa con la subida de la luz «y la tarifa congelada desde hace seis años».

También habló del área de matorrales secos junto al parking. La concejala indicó que las nuevas empresas concesionarias de Parques y Jardines «llevan diez días trabajando» y subrayó que si en esa zona hay alguna parcela «que es nuestra y necesita limpieza o desbroce, lo meteremos en la planificación para que se haga a la mayor brevedad».

En relación con la recepción total del barrio, el concejal de Urbanismo, Raúl López, detalló que para que algo así se produjera, «en primer lugar habría que ver cuál es el origen de esas zonas privativas y luego, tras un informe positivo de todas las áreas, tendría que estar en perfectas condiciones para que se hiciera su recepción».

Con respecto a las barandillas, el concejal de Ciudad Jardín, Avelino Barrionuevo, precisó que se han instalado «por seguridad del propio vecino», para que crucen la calle por los pasos de cebra.

Y sobre el estado de la pista polideportiva, la directora del distrito, Julia Guzmán, informó de que la pista cuenta tanto con redes como con luz, pero los vecinos de los pisos más próximos pidieron que no se encendieran los focos, por las molestias al entrar la luz en sus dormitorios.

Por último, en relación con la calima, el concejal Avelino Barrionuevo explicó que en un primer momento se actuó en la parte más baja de Ciudad Jardín, donde se acumulaba todo el barro a causa de la pendiente y a continuación, «en colegios, farmacias y centros sanitarios». La directora Julia Guzmán precisó que se está haciendo ya una planificación de limpieza por barriadas y que en Cortijillo Bazán se esperará antes a que terminen las obras relacionadas con Emasa.

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