Consumo de agua

Un experto insta a controlar el consumo de agua en todos los ámbitos

El catedrático Juan José Rodríguez cree también que hay que vigilar el desarrollo turístico «para que no sea calificado como no sostenible»

Un hombre llena una botella de agua en una fuente.

Un hombre llena una botella de agua en una fuente. / l.o. málaga

La Opinión

El catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid (UAM) Juan José Rodríguez advierte de la necesidad de «controlar» el consumo de agua «en todos los ámbitos» -agricultura, uso doméstico y turismo-, especialmente en las zonas de estrés hídrico y en las que lo estarán en los próximos años.

«La sociedad tiene el pensamiento de que el agua es ilimitada, un regalo de la naturaleza», señala en una entrevista realizada por Europa Press el experto en agua, quien ha dirigido esta semana el Curso ‘Uso sostenible de los recursos hídricos’ de la Universidad Internacional de Andalucía (UNIA) en Málaga.

Rodríguez afirma que «en Andalucía ahora mismo no hay estrés hídrico, pero puede haber problemas que se le acerquen», y señala la importancia de realizar este curso en Málaga, ya que «es una ciudad que puede presentar problemas por el ‘boom’ turístico que está experimentando debido a un desarrollo turístico que, como no se controle de algún modo, podría ser calificado como poco sostenible».

El catedrático incide en la dificultad de controlar el consumo de agua en el ámbito turístico porque «el turista viene a disfrutar, además de que pagan una habitación con todos los servicios que ésta presta, no vienen para controlar su consumo de agua». «No se pueden imponer medidas al turista como lavarse las manos en cinco segundos, eso no se lo van a tomar bien».

Sin embargo, resalta que se pueden tomar medidas técnicas como instalar temporizadores en los grifos para regular la cantidad de agua, aunque «no dejen de ser incomodidades para el turista», por tanto, «la cuestión es si es socialmente viable». Así, «a los establecimientos hosteleros se les puede cobrar más o menos en función del consumo, pero es muy complicado trasladarlo al turista».

En cuanto a la agricultura, Rodríguez rechaza reducir el número de plantaciones, ya que «podría llevar a un problema de suministro en productos básicos de alimentación como frutas y hortalizas». «Tampoco se le puede decir a ningún agricultor que produzca más o menos o en función del consumo que necesite cada cultivo, como por ejemplo los aguacates». Así, «la cuestión es si hay mercado para esos aguacates, porque si no lo hay, ya sabrá el agricultor como reconvertirse». Para el catedrático, lo fundamental lo representa los sistemas de riego. «Se han ido transformando los sistemas hasta llegar al riego por goteo, que debe imponerse al riego a manta».