Reconocimiento

La Diputación salda su deuda histórica con Bernardo de Gálvez

Nombran Hijo Predilecto de la provincia de Málaga al macharatungo que destacó como héroe de la independencia de los Estados Unidos

La Opinión

La Diputación de Málaga saldó su deuda histórica con el macharatungo Bernardo de Gálvez, héroe de la independencia de los Estados Unidos, y lo nombró a título póstumo -coincidiendo con su 276 aniversario- Hijo Predilecto de la Provincia.

El acto tuvo lugar en el auditorio Edgar Neville de la Diputación. El presidente de la institución, Francisco Salado, lamentó «el retraso con el que se ha celebrado este acto para cumplir con una deuda pendiente». «Dicen que el olvido es como una segunda muerte, y durante demasiado tiempo esta provincia tuvo olvidado a uno de sus mayores héroes, a uno de los primeros malagueños universales», señaló.

A su vez, Salado agradeció «el empuje» de la sociedad civil, representada por la Asociación Bernardo de Gálvez y la Asociación de Granaderos y Damas de Gálvez de Macharaviaya, y de las instituciones locales como el Ayuntamiento de Macharaviaya y la Diputación. «Hemos logrado resucitar la figura de Gálvez», añadió.

En este sentido, el presidente de la Diputación reconoció el trabajo que se ha llevado a cabo durante muchos años para mantener vivo su legado en Estados Unidos tanto por parte de asociaciones y colectivos como las Hijas de la Revolución Americana; los ayuntamientos de Galveston y Pensacola; la embajada de España y los diferentes consulados y por los españoles residentes allí, como Teresa Valcarce o Guillermo Fesser. Salado también tuvo palabras de agradecimiento para los congresistas y senadores Jeff Miller, Marco Rubio y Robert Menéndez, que defendieron la concesión del título de Ciudadano Honorario y que se colgara su retrato en el Senado. Fue en diciembre de 2014 cuando el presidente de Estados Unidos Barack Obama firmó la resolución conjunta del Congreso por la que se concedía a Bernardo de Gálvez dicho título, 229 años después del fin de la Guerra de la Independencia estadounidense.

En su discurso, Francisco Salado se centró en la figura de Bernardo de Gálvez como «un sagaz y valiente militar, con una perseverancia y un arrojo inspiradores». «Fue un fino diplomático con una visión que cambió el mundo», dijo para aclarar que «el nacimiento de los Estados Unidos inició una nueva era en nuestra civilización que hasta hoy perdura».

«Antes que la revolución francesa fue la revolución americana, y tanto la declaración de independencia de los Estados Unidos de 1776 como su posterior Constitución impulsaron el camino para el desarrollo de los derechos humanos», precisó Salado antes de repasar brevemente su historia.

De este modo, «cuando España mantenía una apariencia de neutralidad, Gálvez supo apoyar a los rebeldes en su lucha contra el Reino Unido, suministrándoles un material de guerra que fue decisivo para su causa». «También fue un administrador y virrey de Nueva España; en Méjico se enfrentó con decisión y acciones solidarias sorprendentes para aquel tiempo a las hambrunas y a una epidemia de peste, impulsó las obras públicas y difundió la nueva vacuna contra la viruela. Además, mejoró el gobierno de las distintas provincias del virreinato. Y todo eso en apenas un año porque murió poco después», relató el presidente provincial.

El 23 de julio, una fecha de lo más propicia

El 23 de julio fue la fecha elegida para conceder el título de Hijo Predilecto de la provincia de Málaga a Bernardo de Gálvez. Era una fecha de lo más propicia. Se hizo coincidiendo con el 276 aniversario de su nacimiento en Macharaviaya. Además, se presentó un nuevo retrato que el ente supramunicipal encargó al joven artista malagueño Raúl Berzosa y colgará en las paredes de Presidencia en la institución.

El presidente de la Diputación, Francisco Salado, felicitó al pintor por su «extraordinaria obra y por fortalecer los vínculos de Málaga con América». Salado glosó los muchos trabajos de Berzosa para el Vaticano, entre los que destacan retratos de los papas Juan Pablo I, Benedicto XVI y Francisco, y ensalzó sus pinturas murales de gran tamaño para iglesias de Estados Unidos y Guatemala.