Memoria histórica

La carretera de Almería, protagonista de la Desbandá, nuevo lugar para la memoria democrática junto a Gernika y Belchite

Estos lugares y otros de una larga lista entrarán como lugar de memoria histórica en septiembre, tras su paso por el Senado y su publicación en el BOE

Imagen de La Desbandá.

Imagen de La Desbandá.

La Opinión

La carretera de Málaga a Almería, el pueblo viejo de Belchite, la antigua plaza de toros de Badajoz y la localidad vasca de Gernika serán incluidos con toda probabilidad como nuevos lugares de memoria democrática tras aprobarse la ley en el Congreso de los diputados el pasado mes de julio.

Estos lugares y otros de una larga lista, elaborada por familiares de las víctimas, asociaciones de la memoria y comunidades autónomas, podrían figurar en ese catálogo, ya que la nueva norma, que entrará en vigor en septiembre, tras su paso por el Senado y su publicación en el BOE, contempla la creación de un inventario estatal con una finalidad "informativa, conmemorativa y didáctica".

Se unirían así al Valle de los Caídos, el Fuerte de San Cristóbal en Pamplona, el Panteón de Hombres Ilustres en Madrid, el Palacio de la Cumbre en San Sebastián y el Centro Documental de la Memoria Histórica, con sede en Salamanca y en el que se integra el Archivo General de la Guerra Civil, que ya están citados en la ley.

La norma señala que los lugares de memoria democrática serán aquellos espacios, inmuebles, parajes o patrimonios culturales inmateriales donde haya habido hechos de especial relevancia vinculados a la "represión y violencia" sobre la población, como consecuencia de la resistencia al golpe de Estado de julio de 1936, la Guerra Civil, la dictadura franquista, el exilio, con vistas a "la lucha por la recuperación y profundización de los valores democráticos".

La competencia para declararlos la tendrá la Secretaría de Estado de Memoria Democrática por iniciativa de la Dirección General relacionada con esta materia o como sugerencia de otras entidades.

El presidente de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH), Emilio Silva, estima, en declaraciones a EFE, que deben de ser muchos más los lugares de memoria democrática y recuerda que varias comunidades autónomas tienen leyes propias de la Memoria, donde así los reconocen.

En su opinión, deben figurar los lugares de fusilamiento, los centros de detención ilegal, los campos de concentración franquistas y sus presidios, los lugares de tortura y los de homenaje a las víctimas creados con posterioridad por las autoridades o los familiares.

Reclama que en la Real Casa de Correos, hoy sede del Gobierno de la Comunidad de Madrid y que albergó la Dirección General de Seguridad durante el franquismo, se instale una placa en recuerdo de las personas que allí fueron detenidas y torturadas, "para ser reeducados en las leyes franquistas".

Silva precisa que en el edificio hay tres placas que recuerdan la guerra del 2 de mayo, los atentados de Atocha y a los muertos en soledad durante la pandemia, pero ninguna en conmemoración de los detenidos durante el franquismo.

"Solo hace falta voluntad política -agrega- para reconocer como lugares de la memoria democrática a muchos sitios, porque fueron 40 años de un régimen que arrasó con las libertades".

La Desbandá

El pasado mes de marzo, la mayoría del Congreso aprobó una iniciativa del PSOE que declaraba como lugar de memoria democrática la carretera de Málaga a Almería en la que se produjo el éxodo de refugiados de la Guerra Civil y la matanza posterior, conocido como la Desbandá.

Sucedió a principios de febrero de 1937, cuando más de 150.000 personas huyeron por carretera hacia Almería, reducto aún republicano, ante la inminente ocupación de Málaga por las tropas franquistas.

Murieron miles de ciudadanos a causa de los bombardeos constantes de la armada y de la aviación militar en una zona en la que la población civil no tenía escapatoria, atrapada en una carretera encajada entre el mar y la montaña.

"Fue una barbarie, un éxodo de 150.000 a 300.000 personas, el mayor en Europa de población civil antes de la Segunda Guerra Mundial", comentó a Efe en febrero el diputado socialista por Almería Indalecio Gutiérrez, uno de los impulsores de la iniciativa, junto a su compañero Ignacio López, de Málaga.