Fin a la impunidad: test de alcoholemia y radares para las motos de agua en Málaga

A principios de agosto, la Policía Local de Málaga en colaboración con el Servicio Marítimo de Guardia Civil y Capitanía Marítima de Málaga pusieron en marcha una iniciativa para fiscalizar las malas prácticas de las motos acuáticas y embarcaciones de recreo. 

El objetivo de las medidas llevadas a cabo por este dispositivo de vigilancia es proteger tanto a los usuarios de las playas de la ciudad como a los conductores y pasajeros de las embarcaciones. 

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Aunque el operativo lleva semanas activo, un vídeo de la Policía Local de Málaga posteado el perfil de SocialDrive se ha viralizado y ya acumula más de 160.000 reproducciones y 1.000 me gustas. En él, se pueden ver escenas de los agentes controlando la velocidad de las embarcaciones con el radar, solicitando los papeles a los conductores o realizándoles controles de alcoholemia. 

La pieza corresponde a la primera actuación coordinada, que se llevó a cabo entre el 5 y 6 de agosto entre las 16 y las 19 horas. De las 17 motos náuticas que se fiscalizaron, cinco de ellas fueron denunciadas por exceso de velocidad y ninguna dio positivo en el control de alcoholemia. 

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Otras de las infracciones que se corrigieron durante el dispositivo fueron la prohibición de fondear en la zona habilitada para los bañistas, no tener los papeles de la embarcación o permisos de conducir en regla, realizar comportamientos prohibidos o no colaborar con la Policía. 

¿Cuál es la velocidad máxima permitida para una moto de agua?

Aunque una moto acuática de competición puede llegar a alcanzar 120 kilómetros por hora, la mayoría de las embarcaciones de estas características no superan los 50 km/h. Aun así, la velocidad máxima permitida en las zonas de baño es de tres nudos: 5 kilómetros por hora.