Cerebros de la UMA

¿Son efectivos los servicios públicos de empleo con los jóvenes ‘ninis’ rurales?

Investigadores de la UMA tratan de dar respuesta a esta pregunta con el proyecto ‘Track-IN’, en el que Málaga forma parte de un consorcio internacional con 35 investigadores

Primera reunión del grupo de investigadores en Lisboa el pasado mes de abril. | LA OPINIÓN

Primera reunión del grupo de investigadores en Lisboa el pasado mes de abril. | LA OPINIÓN / Inés Villanueva

Inés Villanueva

La Universidad de Málaga forma parte del proyecto ‘Track-IN’, que tiene como objetivo principal evaluar la efectividad de los servicios públicos de empleo entre los jóvenes que viven en zonas rurales y que no estudian ni trabajan. De esta forma se pretende ayudarlos e integrarlos en el mercado laboral o en el ámbito académico.

El proyecto se divide en tres fases: la primera de ellas -ya puesta en marcha- tiene una duración de un año en el que los investigadores estudiarán la legislación relativa a la política de empleo. En esta fase participan los profesores de la UMA Mariano Soler, del Departamento de Contabilidad y Gestión, y Beatriz Rodríguez, del de Economía Aplicada.

La segunda fase del plan consistirá en llevar a cabo un seguimiento de los jóvenes que viven en las zonas rurales que se realizará a través de encuestas -que van a lanzarse en el mes de noviembre-. Un proceso que se llevará a cabo con ayuda de los servicios públicos de empleo que facilitarán al consorcio internacional los datos de los jóvenes ‘ninis’ rurales. En estas encuestas se pedirá a los inscritos que den su opinión acerca de los servicios sociales de empleo.

Una vez terminadas las dos primeras fases, comenzará la tercera y última, que consiste en desarrollar un estudio de campo con los servicios sociales de empleo.

Este proyecto es un consorcio internacional del que forman parte otras diez instituciones europeas, además de la UMA. Ha logrado una de las 11 ayudas ‘EEA Grants’-de entre más de 150 solicitudes realizadas- que otorgan Islandia, Liechtenstein y Noruega para avanzar hacia una Europa verde, competitiva e inclusiva.

Primeros resultados

Los investigadores del proyecto han podido observar de forma preliminar que «no existe una legislación específica» en ningún país europeo de los que se está estudiando, afirma el profesor de la Facultad de Económicas Mariano Soler, quien ya ha trabajado en otros proyectos similares como el ‘Rural NEETs YOUTH’, que trata el mismo tema que el proyecto ‘Track-IN’.

Los resultados que se vayan obteniendo de la investigación serán publicados en formato de artículos, investigaciones y en un libro, lo que ayudará a los servicios públicos de empleo a mejorar su eficacia con la ayuda de los jóvenes implicados.

«El interés de esta investigación parte de la despoblación que se está viviendo en las zonas rurales y que podría encontrar en esta desatención uno de sus motivos», explica el profesor.

En muchas ocasiones, los jóvenes rurales no están inscritos en los servicios públicos de empleo. Esto puede tener diferentes causas y es uno de los factores que se está investigando.

Así, se está estudiando cómo pueden ofrecer este servicio para que llegue a los jóvenes más fácilmente. Un acercamiento que puede ser de forma presencial en las oficinas de empleo, online o de forma combinada -utilizando las redes sociales e internet como motor-. Los investigadores estudiarán cuál es la mejor forma de llegar a ellos.

Sin embargo, uno de los problemas que se encuentran las zonas rurales es que internet no llega a algunas de estas partes, lo que impide el formato online y el combinado.

A nivel nacional, se puede observar que el porcentaje de estos jóvenes supone cerca del 19% de la población, mostrando una distribución bastante similar en zonas rurales y urbanas: «En España, el porcentaje de jóvenes ninis es un punto porcentual mayor en las zonas rurales que en las urbanas, mientras que en otros países de la Unión Europea, como Rumanía y Bulgaria, es muy superior», matiza Soler.

‘Track’IN’ nace de una acción COST -iniciada en el año 2019-, que son redes dedicadas a la colaboración científica que permiten complementar los fondos nacionales de investigación. Su objetivo principal es fortalecer la investigación científica y técnica en Europa, financiando el establecimiento de redes de colaboración entre investigadores. El objetivo de esta acción es la organización de un Observatorio Europeo de Jóvenes Rurales, que ya se encuentra en fase de creación.

‘EEA Grants’

El proyecto ha conseguido una financiación de más de 1,5 millones de euros y tiene hasta marzo de 2024 para su desarrollo. Están integrados socios de seis países europeos: Bulgaria, España, Estonia, Italia, Portugal y Rumanía, además de Alemania y Suiza que son colaboradores.Así, participan unos 35 investigadores.

Los tres países que donan los fondos con los que se financia el proyecto -Islandia, Liechtenstein y Noruega- cooperan estrechamente con la Unión Europea a través del Acuerdo sobre el Espacio Económico Europeo (EEE).

Los donantes han aportado 3.300 millones de euros a través de planes de subvenciones consecutivos entre 1994 y 2014.

Las subvenciones EEA están financiadas por los tres países donantes, cuyas contribuciones se basan en su PIB. La elegibilidad para las subvenciones refleja los criterios establecidos para el Fondo de Cohesión de la UE dirigido a los países miembros donde el Ingreso Nacional Bruto (RNB) por habitante es inferior al 90% del promedio de la UE.

La Oficina de Transferencia de Resultados de la Investigación (OTRI) –Vicerrectorado de Investigación y Transferencia- ha gestionado la participación de la UMA en esta convocatoria internacional, siendo ‘Track-IN’ el único proyecto de la Universidad de Málaga que lo ha conseguido.

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