Naturaleza

Parajes naturales para diciembre

Desfiladeros, sierras o cañones son solo algunos de los numerosos paisajes que nos regala la provincia de Málaga. Estos espacios naturales son perfectos para disfrutar disfrutar de una escapada en los últimos días de otoño

Las paredes del paraje natural Desfiladero de los Gaitanes, cañón excavado por el río Guadalhorce.

Las paredes del paraje natural Desfiladero de los Gaitanes, cañón excavado por el río Guadalhorce. / Jorge Zapata

Víctor Modelo

Paraje natural Desfiladero de los Gaitanes

Este desfiladero es un cañón excavado por el río Guadalhorce en la provincia de Málaga, entre los municipios de Ardales, Antequera y Álora. Se puede acceder desde el norte por los embalses del Guadalhorce y desde el sur por El Chorro. Algunos de los tramos más angostos del desfiladero tienen una anchura de 10 metros y 700 metros de profundidad. Debido al levantamiento de un canal de agua desde los embalses del norte hasta El Chorro, con el motivo de aprovechar el desnivel y hacer una central hidroeléctrica, se construyó un camino para el mantenimiento del canal, posteriormente conocido como Caminito del Rey. Recibe este nombre porque fue inaugurado por el monarca Alfonso XIII el 21 de mayo de 1921. Tiene una extensión de 2.016 hectáreas.

Esta construcción de unos tres kilómetros de recorrido está compuesta por una pasarela pegada al desfiladero por la que caminar. Hacer una excursión por este recorrido es una experiencia única, ya que el camino se sitúa a 100 metros sobre el río y algunos de los tramos para caminar son bastante estrechos.

Otro de los atractivos de este paisaje natural es su gran variedad de fauna.

Destacan especialmente las 148 especies de aves catalogadas: buitres leonados, águilas, búho real, garza real o pato cuchara, entre otros.

Fotografía de las rocas calizas del Torcal erosionadas por los agentes climáticos. | LA OPINIÓN

Fotografía de las rocas calizas del Torcal erosionadas por los agentes climáticos. / L. O.

Paraje natural del Torcal de Antequera

Asentado en el municipio de Antequera, y en el arco calizo de las cordilleras subbéticas, supone uno de los más espectaculares ejemplos de relieve kárstico de toda Europa. Este paisaje de 1.171 hectáreas es famoso por la rareza de sus torcas, pasillos, cuevas, simas, descansos y desfiladeros. Este entorno debe su nombre a las torcas o dolinas, que son unas depresiones geológicas circulares que se forman por la actividad erosiva.

En este paisaje predominan las rocas calizas con más de 150 millones de años. Su composición lo hace más sensible a la erosión de agentes climatológicos como el viento, la lluvia o la nieve. Las formas que componen el terreno como el monumento natural El Tornillo del Torcal, el Sombrerillo, el Cáliz o el Dado son una colección de esculturas naturales talladas a causa de la erosión por los agentes naturales.

Paseo del Pinsapar, característico por el color rojizo que da nombre al paraje natural de Sierra Bermeja. | LA OPINIÓN

Paseo del Pinsapar, característico por el color rojizo que da nombre al paraje natural de Sierra Bermeja. / La Opinión

Paraje natural de los Reales de Sierra Bermeja

Este espacio natural de 1.236 hectáreas se sitúa en la confluencia de los municipios de Estepona, Genalguacil y Casares. Forma parte del macizo de Sierra Bermeja y separa la Serranía de Ronda de la costa mediterránea durante 35 kilómetros. Este sistema montañoso, con altitud media de 1.000 metros, se encuentra localizado entre la Sierra de las Nieves y el Pico de los Reales.

Atravesar esta sierra permite adentrarse en un paraje de pinsapar unido al color rojizo de sus rocas, que dan nombre a esta cadena montañosa. El contraste de estos colores con las calizas blancas de las Sierra de las Nieves y la Sierra Blanca de Marbella le permite destacar con respecto a su entorno. A esto hay que añadirle la riqueza petrológica de su suelo, ya que constituye la mayor extensión mundial de peridotita, además de ser el único bosque de pinsapos que crece sobre esta piedra.

Paraje natural de Sierra Crestellina

Este lugar se encuentra ubicado en la cordillera penibética y es un empinado peñón de calizas jurásicas que se alza sobre el Valle del Genal. Este macizo de caliza al extremo occidental de Sierra Bermeja, se contrapone con el color rojizo de las peridotitas y el verde-azulado de los pinsapos. Pertenece al municipio de Casares y tiene una extensión de 478 hectáreas, formando casi una pequeña isla blanca rodeada de montañas oscuras.

Junto al macizo de la Sierra de Utrera suponen los únicos enclaves en los que predomina el gris de la caliza. Su nombre se debe a la forma que tienen sus cimas, verdaderas crestas inaccesibles elegidas por aves rapaces como los buitres leonados para hacer sus nidos. La principal corriente de agua de la zona es el arroyo de Albarrán. Este espacio presenta una gran variedad de fauna, con cabras montesas, pequeños anfibios y más de 115 especies de vertebrados.

Puente de los Alemanes en el Cañón de las Buitreras, Cortes de la Frontera

El Cañón de las Buitreras es un monumento natural hallado en el extremo oriental del Parque Natural de los Alcornocales, entre los municipios de Cortes de la Frontera y Benalauría. La verticalidad de sus paredes y los más de 100 metros de profundidad que albergan, alcanzando los 200 metros en la Garganta de Buitreras, constituyen un enclave excepcional para los amantes de los descensos por barrancos, autorizados únicamente entre el 15 de julio y el 15 de diciembre.

El río Guadiaro y el alto índice de precipitaciones han ido tallando la roca como si de un escultor se tratara. Su nombre proviene de la importante colonia de buitres leonados que nidifican en sus cortados. La especie vegetal más llamativa es el palmito, la única palmera propia del continente europeo.

La aportación humana también constituye un atractivo en la construcción del paisaje. El Puente de los Alemanes, construido en 1918 a 60 metros sobre el barranco, forma parte de un camino de seis kilómetros que conduce el agua hacia la central eléctrica de El Colmenar.

Águila de los Riscos, Júzcar-Cartajima

Este joven torcal forma rocas evocadoras y estimulantes para la imaginación de los caminantes. Se encuentran en la Sierra del Oreganal y dentro de la comarca de la Serranía de Ronda.

Este espacio natural se articula en tres callejones principales con numerosos pequeños desfiladeros, simas, grietas y curiosas formas que meritan el nombre de esculturas. La más destacada y merecedora de atención es “El Águila”, roca que asemeja a un rapaz oteando el horizonte.