Balance agrario de Asaja

El campo malagueño califica de "desastre" el año por la subida de costes, pese a mantener la facturación

Las ventas han sido de 701 millones, con un 1,6% de incremento, pero agricultores y ganaderos hablan de una cifra "engañosa" ya que la rentabilidad "se ha hundido" - La energía ha subido un 270%, plásticos y piensos un 40% y los fertilizantes un 230%

La presentación del balance agrario de Asaja ha sido encabezada por su presidente, Baldomero Bellido.

La presentación del balance agrario de Asaja ha sido encabezada por su presidente, Baldomero Bellido. / L. O.

José Vicente Rodríguez

José Vicente Rodríguez

La patronal agraria malagueña Asaja ha calificado este jueves de "desastre" la situación que vive el sector, a pesar de haber mejorado ligeramente en este 2022 las cifras de facturación del pasado ejercicio (han sido 701,5 millones de euros, con un incremento del 1,62%). El presidente de Asaja, Baldomero Bellido, ha lamentado la "asfixia" en la que viven agricultores y ganaderos por el enorme incremento de los costes de producción que han sufrido este año y ha recordado que el nivel de facturación, pese a subir, es uno de los más bajos de la serie histórica y da continuidad a un 2021 que también fue malo para el campo.

La agricultura, con una cifra de 574,38 millones, incrementa su facturación un 0,7% con respecto a 2021, con el olivar y los tropicales una vez más como los grandes "bastiones agrícolas" de la provincia. Por su parte, la ganadería, con una facturación de 127,7 millones, registra un incremento del 8,9%.

"Siguiendo la triste estela de los últimos años, el sector agrario en la provincia ha seguido sufriendo los insostenibles incrementos de costes de producción, que se traducen en un aumento de la energía del 270%, un 40% de los plásticos, el 40% en los piensos y un 230% de los fertilizantes", ha explicado Bellido en la presentación del balance agrario de 2022. 

El presidente de Asaja ha afirmado que el "desmesurado" aumento de los costes en todos los sectores hace que las cifras de facturación sean "engañosas", ya que el gasto de mantenimiento de las explotaciones reduce al mínimo la rentabilidad, cuando no aboca a pérdidas.

"Venimos escuchando mucho de los ganaderos la frase: 'o come el ganado o como yo', y ante esta situación extrema, muchos están optando por abandonar la actividad. Y en el caso de los agricultores, hay cultivos que no se siembran o árboles donde no se recoge la fruta, porque es más el gasto que lo que se gana", ha apuntado. Ante esta situación, Asaja ha anunciado que pedirán rebajas fiscales para agricultores y ganaderos de cara a la próxima declaración de la Renta.

Los niveles de facturación agraria de Málaga se mantienen así, según Asaja, en niveles similares al "absoluto desastre" de la campaña pasada. "Cada vez es más difícil mantener rentabilidad, y en bastantes sectores se está trabajando por debajo de los costes de producción, con pérdidas, lo cual provoca el abandono de explotaciones dificultando el relevo generacional y el futuro de la agricultura malagueña", han alertado.

Asaja ha mencionado también factores como la "competencia desleal" de terceros países que, a su juicio, "vuelve a demostrar que la Ley de la Cadena alimentaria es una falacia que no responde a las necesidades del sector".

Además, se ha referido a la grave situación de sequía, advirtiendo de que las precipitaciones registradas estos días pueden ser un "punto de inflexión" si tienen continuidad en los próximos meses, pero no resuelven por sí mismas el problema.

"Continuamos inmersos en una situación dramática de sequía, que no se ve paliada con las lluvias de las últimas semanas, estamos contentos por la forma y cantidad recibida, pero aún no es suficiente. Nosotros seguimos insistiendo en la realización de las infraestructuras necesarias a incluir en el tercer ciclo de planificación hidrológica", ha señalado.

Bellido ha detallado que las lluvias de esta última semana han permitido salvar a muchos árboles que corrían el riesgo de secarse pero es necesario que tengan ahora continuidad. "El campo estaba seco después de tantos meses y ha absorbido el agua como un esponja. Ahora necesitamos que siga lloviendo para que lo noten más los embalses", ha explicado.

Asaja ha sido también muy crítica con el nuevo marco comunitario de la PAC, asegurando que va a ser perjudicial para comunidades como Andalucía o Castilla León, cuyo peso agrícola, en su opinión, no ha sido valorado correctamente. 

"Hemos chocado con un muro al igual que está ocurriendo con otros temas de la vida política en la que se toman decisiones que atañen directamente a nuestro sector, pero de espaldas a él. Nos encontramos con un sistema que nos incrementa las obligaciones, y por tanto las inversiones, sin recibir ningún beneficio por ello, y en ningún momento se nos ha citado para negociar las normativas, tan sólo para informarnos sobre lo acordado con las comunidades autónomas, sin tener en cuenta la importancia agrícola de cada una de ellas, como es el caso de Andalucía", ha comentado Bellido.

Para esta asociación, el campo "no para de recibir ataques con publicación de normativa siempre redactada desde el calor de los despachos sin conocer la realidad del día a día de agricultores y ganaderos".

Olivar

El olivar sigue siendo el cultivo mayoritario de la provincia con más de 130.000 hectáreas y ha registrado 230 millones de euros de facturación, con un aumento del 30%. Este año, sus cifras arrojan una producción baja de aceite (57.533 toneladas), en niveles algo inferiores a los de la campaña pasada, pero con precios récord (3,35 euros el kilo), superiores incluso a los de 2017, que han permitido incrementar el resultado. En cuanto a la aceituna de mesa, la producción se mantiene al mismo nivel que en 2021, mientras que el precio también se ha incrementado ligeramente.  

"Por tanto, a pesar de no tener gran cosecha para aceite, el precio hace que tengamos la tercera facturación más alta de la historia, tras la de 2016 con 250 millones de euros y 2018, con 254 millones de euros", ha afirmado Asaja. El motivo de los buenos precios es que el mercado ha demandado mucho aceite ante la perspectiva de una próxima cosecha (la actual, que será la que se comercialice en 2023) que va as ser muy baja por los problemas de sequía.

Subtropicales

Por su parte, los cultivos tropicales de la provincia han registrado un mal año, con una facturación de 104,1 millones de euros y una caída del 29,5% sobre 2021. La campaña de aguacate ha sido muy atípica con "un mercado muy pesado y dificultades de venta" que provocaron un descenso generalizado de precios en el mercado europeo y, por ende, para el agricultor. Y aunque el inicio de la campaña 2022/23 se está desarrollando mejor, a facturación del aguacate ha bajado de 116,4 millones a 76,5.

Por su parte, el mango ve incrementada su producción respecto al año anterior, pero la facturación ha sido sólo de 23,1 millones.

"La dificultad, en este caso, ha estribado sobre todo en los pequeños calibres y en algo que ya ha pasado en campañas pasadas, la concentración de la oferta en un breve periodo de tiempo. Los precios han sido más bajos en líneas generales y en algunos casos, pésimos", ha detallado Asaja.

Cítricos

En cuanto a los cítricos malagueños, concentrados fundamentalmente en el Valle del Guadalhorce, Asaja califica la campaña de "ruina absoluta". Señala que la importación y la gestión en los lineales han supuesto un "destrozo" en los precios que deja a la naranja en mínimos históricos, con una facturación de 5,9 millones de euros y un descenso de más de un 70% respecto a 2021. Los pequeños cítricos bajan la facturación en casi un 60%, cayendo hasta los 3,8 millones de euros frente a los 7,9 de 2021. El limón es el único fruto que se mantiene en niveles de campañas anteriores con una facturación de 27,6 millones.

Almendro, castaña, viñedo y herbáceos

El almendro ha sufrido un descenso del 21,6% en la facturación respecto a 2021. En cuanto a la castaña, la producción y comercialización en la Serranía de Ronda "no remonta y continúa siendo un desastre sin paliativos, que lleva arrastrándose desde 2019", ha detallado Asaja.

El viñedo ha continuado en su tendencia de descenso, ya que la sequía ha afectado al calibre de la uva. Por otra parte, se ha mermado la producción de cultivos herbáceos, aunque han incrementado su facturación durante esta campaña en torno a un 15%. Los cereales han sufrido un descenso de producción respecto a 2021, pero un incremento del precio de un 66%.

Ganaderos demandan un "apoyo adicional"

Por su parte, los ganaderos malagueños han insistido en que realizan "una importante labor de contención de enfermedades que entran desde el norte de África, para evitar su propagación en la Unión Europea", por lo que han demandado "un apoyo adicional a ese gran esfuerzo" que realizan sus explotaciones ganaderas a través de acciones "cuyo coste asume el propio ganadero".

Respecto a los datos, en el porcino blanco ha habido este año una facturación récord, con un total de 54,24 millones de euros, motivado por un incremento del precio respecto a 2021, mientras que en el porcino ibérico se ha mantenido la situación.

La leche de cabra se ha mantenido también estable respecto a 2021, alcanzando los 39,12 millones de euros, pero sufriendo un acusado descenso en cabezas de ganado, cifra que previsiblemente continuará descendiendo.

La carne de chivo ha seguido en "caída libre" y ha superado su último récord en negativo del año pasado, con una facturación de 5,96 millones de euros. En cambio, la carne de ave y huevos han incrementado su nivel de facturación respecto a 2021 alcanzando los 11,46 millones de euros.