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Las llamadas por suicidio al Teléfono de la Esperanza se disparan tras la pandemia

El Teléfono de la Esperanza ha atendido 924 llamadas de temática suicida durante 2022, el triple que en 2020 - El programa pionero 'El Chat de la Esperanza', dirigido a jóvenes y adolescentes, ha dado respuesta en su app a 403 mensajes por ideaciones suicidas

La Opinión

El INE, Instituto Nacional de Estadística, ha publicado los datos de defunciones del año 2021. En ese año se produjeron 16.831 fallecimientos por causas externas. El suicidio se mantuvo como la primera causa de muerte externa en España con 4.003 fallecimientos, un 1,6% más que en 2020. En Málaga, se registraron 187 suicidios frente a 163 del año 2020.

La evolución en aumento de estas cifras del INE se corresponde también con un incremento en las peticiones de ayuda recibidas en el Teléfono de la Esperanza relacionadas con el suicidio. Entre el 1 de enero y el 23 de diciembre de 2022 nuestro equipo de orientadores formados para la escucha activa atendió un total de 19.803 llamadas, de las cuales 924 estuvieron relacionadas con la temática suicida (726 por ideaciones, 163 en situaciones de crisis y 35 actos en curso). Hemos pasado de responder 310 llamadas de ese tipo en el 2020 a 546 en 2021 y 924 una semana antes de acabar 2022.

Además, los voluntarios del programa innovador 'El Chat de la Esperanza', dirigido a jóvenes y adolescentes, dieron respuesta a 403 peticiones de ayuda por temática suicida (382 en mensajes a través de la app y 21 presencialmente).

'El Chat de la Esperanza' es un programa piloto que comenzó a funcionar en marzo solo en Malaga, pero con vocación de extenderse a todas las sedes de la asociación. Los usuarios acceden a la web https://www.telefonodelaesperanza.org/malaga/whatsapp-telefono-malaga y a través de la app Conéctate.social que se puede descargar en Google Play y Apple Store. La iniciativa ha tenido una gran acogida, ya que se han hecho 3.660 atenciones desbordándose la previsión inicial de dar respuesta solo a los más jóvenes. Un 21% de los atendidos tenían menos de 18 años, el 26% entre 19 y 25, un 25% de 26 a 45 años y el resto más de 45. Las conexiones nos están llegando desde numerosos países del mundo. Parte de las personas que contactan con nosotros son derivadas por los médicos de atención primaria y otras asociaciones malagueñas. Las solicitudes de apoyo están relacionadas no solo con el suicidio, si no también con situaciones de soledad e incomunicación, bullying, falta de sentido vital y otros problemas de salud mental.

Captación de voluntarios jóvenes

El servicio viene funcionando de 18.00 horas a 00.00 horas de lunes a viernes, pero la alta demanda de orientación por este nuevo canal nos requiere ampliar las horas de atención. El presidente del Teléfono de la Esperanza, Juan Sánchez, ha hecho un llamamiento "a la gente joven de Málaga para formarse en nuestro voluntariado e intervenir dando respuesta por este

medio de comunicación".

Actualmente el Teléfono de la cuenta con unos 200 voluntarios en las diferentes áreas de la asociación; Orientación Telefónica, Consultas profesionales (psicólogos, abogados y trabajadores sociales), Administración, Coordinadores de cursos y talleres y equipos en los programas 'El Chat de la Esperanza', 'Brújula de la Esperanza' (mayores) y 'Entre Amigos'.

El avance de la problemática del suicidio hace necesario un análisis en profundidad, para tratar de localizar posibles causas y factores que puedan estar influyendo.

El suicidio, en muchas ocasiones, se puede prevenir. Esta prevención pasa por la información y la sensibilización de la población, la formación de grupos claves para la detección e intervención, la atención inmediata de las personas con conducta suicida, la atención a familiares y personas allegadas y la coordinación de todos los dispositivos de ayuda.

Desde el Teléfono de la Esperanza se lleva a cabo un programa transversal de prevención de suicidio, que aborda tanto las crisis de suicidio con las personas afectadas y sus familiares, como la sensibilización y el trabajo en red con otras instituciones. Es por ello que se ha unido, junto a otras entidades, a la Plataforma Hagamos Un Plan, con el fin de impulsar en las instituciones públicas ese tan necesario Plan Nacional de Prevención del Suicidio.