La UMA, a fondo

«No le vemos el final al crecimiento de la demanda en Informática»

La ETS de Ingeniería Informática trabaja para ofrecer el próximo curso un nuevo grado de ciberseguridad e inteligencia artificial y confía en atraer cada vez a más mujeres

Estudiantes en la ETS de Ingeniería Informática.

Estudiantes en la ETS de Ingeniería Informática. / I. Cisneros

Isabel Cisneros

La Ingeniería Informática es el grado de mayor implantación en España y la demanda es muy alta. La Escuela Superior de Ingeniería Informática de la Universidad de Málaga, fundada en 1983, da respuesta a este interés. «Todos nuestros estudiantes cuando terminan los estudios tienen oferta laboral donde han hecho las prácticas. No todos lo cogen porque tienen opciones mejores en otras empresas», explica Manuel Enciso, director de la Escuela.

La alta demanda existente lleva a que muchos alumnos se queden sin plaza cada curso y es algo que inquieta a Enciso: «No le vemos el final al crecimiento de la demanda y nos preocupa no poder darle la oportunidad a todos los alumnos que solicitan plaza porque todos tienen la Informática como primera opción».

Esta Escuela tiene actualmente una oferta de cinco grados y tres postrados: Grado en Ingeniería Informática, Grado en Ingeniería del Software, Grado en Ingeniería de Computadores, Grado en Ingeniería de la Salud y un Doble Grado en Ingeniería Informática y Matemáticas. En cuanto a las titulaciones posgrado cuentan con tres másteres: Máster en Ingeniería Informática, Máster en Ingeniería del Software e Inteligencia Artificial y Máster en Transformación Digital de Empresas. De todos los grados mencionados, el más demandado es el de Ingeniería de Software. Además, es el título con más nota de toda España. «Los estudiantes vienen con unas ganas para hacer el grado que enorgullece mucho», añade Enciso.

Otro punto fuerte de la Escuela son los grupos de investigación. Tienen el primer grupo de investigación sobre ciberseguridad de toda España y otro en inteligencia artificial, que se posiciona como el segundo de Andalucía. La ciberseguridad se encarga de la protección de los sistemas, los datos, del usuario, de las organizaciones, e incluso, de países.

Estudiantes de Ingeniería Informática de la UMA.

Estudiantes de Ingeniería Informática de la UMA. / A. Jurado

Nuevo grado

Manuel Enciso asegura que para estudiar la ciberseguridad es imprescindible combinarlo con la inteligencia artificial. «La idea de combinar la ciberseguridad y la inteligencia es muy buena. Es necesario evitar que alguien ataque la inteligencia artificial», explica. Por ello, se está trabajando en poner en marcha en la Universidad de Málaga un nuevo grado mixto que una las dos disciplinas en un total de cuatro años.

Enciso explica que actualmente nos encontramos en un escenario geopolítico-internacional en el que los ataques ya no solo vienen de los piratas que quieren conseguir dinero. El peligro viene de ciertos estados o de grupos organizados que están atacando. Por lo tanto, es algo que debe estudiarse y «tenemos que dotar a la sociedad de personas que puedan ofrecer protección en este ámbito».

El último informe que publicó Europa sobre este tema hace hincapié en que hacen falta, de cara a los próximos cinco años, 85.000 profesionales expertos en ciberseguridad.

Este proyecto de grado está actualmente sometido a la revisión por parte de la Agencia de Acreditación Nacional y a la Agencia de Acreditación Andaluza. Así, se está a la espera de que este mes de enero reciban la respuesta sobre las posibles mejoras en cuanto al modelo que han presentado.

«Nuestro objetivo es que esté aceptado y que los alumnos puedan matricularse para el próximo curso, en septiembre de 2023».

En el caso de que el proyecto salga adelante contará con 65 plazas, que es el máximo que marca la Junta de Andalucía.

En el plan de estudios han reducido la parte física de la informática y han conservado la parte lógica.

Manuel Enciso, director de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Informática de la UMA.

Manuel Enciso, director de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Informática de la UMA. / I. Cisneros

Conexión con las empresas

Las empresas están conectadas de manera directa con todos los grados de esta Escuela. Por ejemplo, se ofrecen masterclass con la participación de las empresas y sus ingenieros, lo que hace que los alumnos se sitúen en el mundo laboral y tengan más ilusión y ganas por seguir estudiando el grado hasta el final.

«Algunos abandonan los estudios porque las empresas les ofrecen buenos puestos de trabajo y les resulta incompatible con los créditos que les quedan. Sobre el nuevo grado las empresas nos preguntan si tienen que esperar cuatro años para que salga un perfil de trabajador con esas características, y yo les digo que desgraciadamente sí porque es lo que dura el grado», cuenta entre risas Manuel Enciso.

Hablar de inteligencia artificial y ciberseguridad puede resultar abrumador ante el desconocimiento general que existen aún en estas materias, pero Enciso asegura que es necesario tener conocimientos en ambos ámbitos: «Los ataques de ciberseguridad están al nivel del tráfico de drogas y de armas. El mercado negro es cada vez más potente y se están produciendo movimientos de los grades grupos de mafiosos hacia la ciberseguridad y la inteligencia artificial. Hay que desmontar la creencia por parte de la sociedad de que la inteligencia artificial da miedo, que es peligrosa».

Entrada de la Escuela Superior de Informática.

Entrada de la Escuela Superior de Informática. / I. Cisneros

Brecha de género

Los grados de ingenierías tienen aún un porcentaje muy bajo de mujeres. En la Escuela Superior de Informática el porcentaje total de todos los grados es del 15%. Un dato preocupante porque indica que la brecha de género en este sector persiste.

Manuel Enciso, al remontarse a las primeras promociones, cuando él estudió, recuerda que prácticamente la mitad de su clase eran mujeres. Estaba equilibrado. «No quiero decir que es por esto, pero esta bajada coincide con el momento en el que la informática se convierte en una ingeniería. La sociedad tiene una visión de la ingeniería que difiere bastante de la realidad. No se trata de personas frikis sentadas delante del ordenador», defiende.

El director de esta escuela de la UMA afirma que la informática es un concepto muy amplio, que abarca desde el ámbito sanitario, pasa por la publicidad y el marketing y llega hasta la música, entre otros. Después de analizar los estudios por los que suele optar el género femenino según los datos de la Universidad de Málaga, Enciso opina que en el momento en el que la ingeniería se vea como una herramienta para el progreso y el cuidado de la sociedad, las mujeres se acercarán a ella.

«Tenemos que conseguir que las mujeres vean que la ingeniería se preocupa por las necesidades de la sociedad, que cambia el mundo y sirve para progresar. Sería muy bonito que nos eligiesen. La inteligencia artificial puede ser una buena opción para esto».

Oracle4girls y la Universidad de Málaga realizaron durante el verano de 2022 en la ETSI Informática unos talleres tecnológicos gratuitos para 100 niñas de 4 a 16 años organizados por Oracle, la Universidad de Málaga y Málaga TechPark.

En estos talleres, que duraron dos semanas, las empresas se comprometieron, una vez más, con la Escuela a hacer llegar la ingeniería a los alumnos. En este caso participaron únicamente ingenieras, para que las niñas se se sintiesen más cerca de esta disciplina, e incluso, se visualizasen en un futuro como ingenieras.

«Había grupos, incluso, de niñas de cinco años. Me encantó ver a niñas desde tan pequeñas familiarizándose con la informática. Se lo pasaron muy bien», afirma Manuel Enciso.

Añade que es posible que, la decisión de que solo pudiesen inscribirse niñas en este campus sea una discriminación positiva. Sin embargo, asegura que fue una buena opción. «Nuestra intención es crear una familiarización con la ingeniería desde que los estudiantes son pequeños. Si las mujeres son las que están alejadas de esto, ¿por qué no facilitar las pocas plazas que había al nicho que más nos interesa actualmente?».

Las empresas, según el director de la Escuela Superior de Ingeniería Informática, dan bastantes facilidades a la hora de que el trabajo sea cómodo. Actualmente casi todos los ingenieros teletrabajan, tienen buenas condiciones laborales y es posible la conciliación familiar. «Cuando a una empresa se le plantea la posibilidad de contratar a un perfil de ingeniero, y hay una mujer y un hombre, optan por la mujer para enriquecer el mundo de la ingeniería. Esto es muy necesario y reconfortante.»

Unos años atrás, el índice de abandono en las ingenierías era muy alto a partir de tercer y cuarto curso, pero a medida que han ido pasando los años ha disminuido. Por tanto, las aulas que estaban vacías y estaban destinadas a tercero y cuarto están completas. Estos son datos muy positivos, pero provocan una falta de espacio físico. Una situación que no sólo afecta a los alumnos que estudian grados, sino también a los que estudian másteres, a los grupos de investigación, etc. Todos los grados que se estudian de Ingeniería tienen evaluación continua y realizan proyectos en aulas conjuntas que necesitan más espacio.

Por ello, el grado de Ingeniería en Telecomunicaciones y el de Ingeniería Informática han solicitado de manera conjunta una ampliación con un cuarto módulo. Ahora mismo la propuesta está hecha y se ha considerado como importante. Se ubicaría en el jardín, junto a la autovía y sería un edificio polivalente, dedicado a la enseñanza y con espacio para los grupos de investigación y demás necesidades de espacio.