LA UMA a fondo

"Tenemos muchas medidas novedosas que nos han hecho avanzar hacia la igualdad"

La vicerrectora Isabel Jiménez valora el IV Plan de Igualdad de la UMA y analiza los retos como que haya más mujeres catedráticas y honoris causa y más formación con perspectiva de género. La UMA tiene el primer título de una universidad pública española de Experto Universitario en Agente de Planes de Igualdad

Isabel Jiménez Lucena, vicerrectora de Igualdad, Diversidad y Acción Social de la Universidad de Málaga

Isabel Jiménez Lucena, vicerrectora de Igualdad, Diversidad y Acción Social de la Universidad de Málaga / Susana Fernández

El mes de la lucha por la igualdad ha vuelto a evidenciar el importante papel de la Universidad de Málaga. Su compromiso y responsabilidad en este ámbito es absoluto y trasciende al 8M con un trabajo que se realiza los 365 días del año. Como hoja de ruta de ese esfuerzo, la UMA acaba de presentar su IV Plan de Igualdad con 76 medidas para seguir avanzando en la batalla contra la discriminación de género.

«Tenemos muchísimas medidas novedosas. Vamos caminando hacia la igualdad que queremos plena porque todavía, a nivel social y en las universidades españolas, hay brechas», expone la vicerrectora de Igualdad, Diversidad y Acción Social, Isabel Jiménez Lucena.

Partiendo del elevado cumplimiento del anterior Plan de Igualdad, ejecutado en un 80% y con otro 7% de medidas en vías de materialización, el IV Plan estará vigente hasta 2026 y representa el compromiso de la UMA contra la discriminación entre hombres y mujeres.

Sus 76 medidas está dispuestas alrededor de nueve ejes: Visibilización y Comunicación, Sensibilización, Docencia, Investigación, Acceso y Promoción profesionales y de representación, Conciliación corresponsable, Violencia de Género, Formación y Seguimiento y Evaluación.

Para elaborar este plan se parte de lo ya conseguido, entre lo que Isabel Jiménez subraya medidas como las referentes a la conciliación, donde la UMA ha sido pionera con una normativa al respecto.

En este punto, destaca la creación del coeficiente CCC (Coeficiente de Compensación por trabajo de Cuidados), con el que la universidad demuestra «de qué manera podemos hacer que las personas que tengan que dedicar un tiempo de su vida al trabajo de cuidados no sean castigados por ello». «No puede ser que el trabajo de cuidados esté castigando a las mujeres, que incida de manera tan negativa en las carreras profesionales», defiende la vicerrectora.

Con esta novedosa normativa y este coeficiente, la universidad ha avanzado en una de los principales lacras para las mujeres. «Hemos sido valientes, pioneros y con una conciencia de que realmente es de justicia que a las personas se les reconozca su valía y su valía no desaparece por dedicarse un tiempo a los cuidados», sentencia Jiménez.

Igualmente, la UMA tiene el primer título de una universidad pública española de Experto Universitario en elaboración de Planes de Igualdad y ha incorporado el ‘Suplemento europeo al título en Igualdad de Género’, un itinerario formativo de actividades específicas de perspectiva de género que se añade a cualquier titulación universitaria.

En cuanto a la formación, este 8 de marzo la UMA ha realizado un reconocimiento a quienes trabajan con perspectiva de género. Así, además de sus ya clásicos premios Carmen de Burgos y Victoria Kent, que han recaído en la periodista Sonia Moreno Bárcena y en María Emilio Nieto y Ana Fernández Quiroga (accésit), respectivamente, ha ensalzado la labor de otras personas e instituciones.

El pasado día 8 también se entregaron premios a los mejores trabajos de fin de estudios de Grado y Máster en Igualdad, Diversidad y Acción Social. Los galardonados fueron: María Dolores Quintana Campos, Alicia Fernández Montenegro, Luis María Arjona Rojo, Juan José Vela Jiménez, y Paula García Guzmán.

Además, la UMA reconoció a las titulaciones que se han distinguido por la promoción de la Igualdad: los grados de Bellas Artes, Enfermería, Fundamentos de Arquitectura, y los másteres en Cambio Social y Profesiones Educativas, Erasmus Mundus en Tecnologías de la Traducción y la Interpretación, máster de Igualdad y Género, máster en Arquitectura, máster en Desarrollos Sociales de la Cultura Artística y el máster en Proyectos Arquitectónicos: Diseño Ambiental y Nuevas Tecnologías.

Jiménez es optimista en este camino hacia la igualdad. | L.O.

Jiménez es optimista en este camino hacia la igualdad. / Susana Fernández

Más sensibilización

El IV Plan de Igualdad de la UMA continuará con algunas de las medidas del anterior, por ejemplo en materia de sensibilización, consciente de que aún no está todo hecho y más aún en una institución en la que una «amplísima mayoría de la comunidad», el estudiantado, se va renovando.

Respecto a la sensibilización de los jóvenes, la vicerrectora de Igualdad indica que sólo un 20%, que en el caso de los universitarios sería un 10%, no están aún en el camino de la igualdad según las encuestas generales que se realizan.

«Estamos hablando de un 20%, es decir una minoría muy minoritaria, pero es muy ruidosa y parece que también se recoge mucho la noticia cuando esa minoría hace cualquier acción. Eso me preocupa realmente», expresa Jiménez.

Frente a esto, apuesta por no poner el único foco de atención en esa parte de la juventud, «porque estamos creando una imagen que no es real... Ese 80%, que en la Universidad es mayor, son a los que tenemos que poner como referentes», afirma.

Retos hacia la igualdad

Uno de los ejes en el que la UMA tiene pendiente un mayor avance es el de los techos de cristal. Según la vicerrectora, aún existe un déficit muy importante en los niveles más altos de las carreras académicas, con solo un 20% de catedráticas en las universidades españolas.

Una situación que se repite en el porcentaje de doctoras honoris causa. «Tenemos que hacer más esfuerzo», indica. Y apunta que la causa está en la propia historia de la ciencia. «Cuando se hace una propuesta de honoris causa se piensa automáticamente en hombres porque la ciencia ha sido muy androcéntrica y ahora la estamos modificando pero no se cambia una cultura científica ni en una década», afirma Isabel Jiménez.

Otra preocupación de la Universidad de Málaga es que haya más formación con perspectiva de género. Ahora está terminando el curso de Introducción a la perspectiva de género en investigación, cuya importancia destaca especialmente la vicerrectora para mejorar la ciencia: «Si en investigación no se introduce la perspectiva de género cuando podría hacerse es porque no se está haciendo el esfuerzo completo para elaborar una mejor ciencia».

En la misma línea, la UMA realizará un mayor esfuerzo en introducir la perspectiva de género en la transferencia de conocimiento, «en aquellos temas en los que sea pertinente».

Isabel Jiménez pone como ejemplo el curso de experto en Planes de igualdad, que es «una manera de transferir un conocimiento que se genera a la sociedad, para que se formen personas expertas en planes de igualdad, que son obligatorios y que la mayoría de gente no sabe cómo hacer».

Además, defiende acabar con la masculinización en la transferencia de conocimiento y que cualquier persona que genere ciencia pueda hacerlo. «Es una transformación cultural en realidad, hacer una cultura mucho más inclusiva es la única manera de que tengamos una sociedad más igualitaria».

En relación también con este aspecto, la vicerrectora de Igualdad, Diversidad y Acción Social reconoce que el desequilibrio entre chicos y chicas en algunas titulaciones es un tema «rocoso» que hay que analizar en profundidad para poder solucionarlo. «Me preocupa tanto que no haya chicos en Educación Infantil, que no los hay, como que no haya chicas en las llamadas STEM», dice.

En este tema también tiene mucha importancia el lenguaje. Así, Jiménez explica que hay carreras con un porcentaje muy pequeño de mujeres que cuando se llamaban de otra forma tenían más alumnas o al revés, como el grado en Ingeniería Informática, que antes se llamaba Diplomatura en Informática, o Ingeniería de la Salud, que no está masculinizada.

El cuarto Plan de Igualdad de la UMA, cuyas medidas se han calendarizado para una mejor evaluación y garantizar su cumplimiento, también ahondará en una medida del tercer plan: trabajar las masculinidades.

«Parece que solamente las mujeres hemos sido marcadas por el género, pero los hombres también. Las masculinidades que llamamos tóxicas tenemos que ir deconstruyéndolas, no sólo para el bien de las mujeres, sino también de los hombres», detalla Isabel Jiménez.

En este camino hacia la igualdad, la Universidad de Málaga va de la mano con el resto de universidades españolas. Así, destaca la labor de la Red de Unidades de Igualdad de Género para la Excelencia Universitaria (Ruigeu), donde se comparten las buenas prácticas en este ámbito. «Las unidades de Igualdad de las universidades son un referente de buenas prácticas para el resto de administraciones y de la sociedad. Son un ejemplo de trabajo cooperativo».

Como conclusión de este mes de la igualdad y del 8M, la vicerrectora realiza una reflexión sobre el exceso de actos y actividades y apunta que esta efeméride no debe «cerrarse en sí misma, sino ser una oportunidad para plantearse el trabajo de los siguientes 365 días». «El 8M es muy importante porque visibiliza pero hay que poner mucho el foco en el trabajo de reflexión y el de planificación de la acción», concluye.