Con todos los focos del proceso de investidura acaparando buena parte de la actualidad nacional, la visita de este sábado de Pedro Sánchez a Málaga también admite una interpretación aliñada con ingredientes locales. El mitin con el que abre el curso político llevará al líder socialista a culminar un triplete malagueño que habría iniciado hace algo más de medio año, el pasado 12 de febrero. Esta será la tercera vez que protagoniza, desde entonces, un acto en la capital malagueña. Y para todos ellos, incluido el de estos albores de septiembre, se ha elegido el mismo escenario.Se trata del hotel NH de Málaga, situado junto al caudal seco de un río cuyo nombre valdría para bautizar este serial de baños partidistas de cariño. Podría decirse, de hecho, que Pedro Sánchez completa su ‘trilogía Guadalmedina.

La visita ha disparado el interés que ya de por sí destilaban las dos anteriores, cuando en la precampaña de las elecciones municipales acudió en ambas ocasiones a apoyar al candidato socialista a la alcaldía de Málaga, Dani Pérez. La segunda de ellas, que tuvo lugar el 2 de mayo, coincidió con el aniversario de la fundación delPSOE.

La intervención del presidente del Gobierno en funciones se aguarda con interés tras su infructuosa reunión con Alberto Núñez Feijóo de esta misma semana o con la propuesta del PNV para cambiar el modelo de estado en el candelero.

Con su visita a Málaga, Pedro Sánchez se deja ver nuevamente por Andalucía coincidiendo con el arranque del curso político. El año pasado por estas mismas fechas, el líder socialista ya protagonizó su mitin iniciático en una barriada de Sevilla: Pino Montano. Ahora, su agenda reincide en la misma comunidad autónoma y, en la elección del escenario para el pistoletazo de salida, puede existir cierta intención encaminada a desquitarse de su ausencia en el sur del país, durante la campaña electoral de los comicios generales del 23 de julio.

El hecho de que Sánchez no programase ningún acto público en la geografía andaluza fue usado como arma arrojadiza por el PP, que en cambio sí ‘paseó’ a Alberto Núñez Feijóo por Sevilla, Cádiz y Málaga. Incluso, la capital de la Costa del Sol fue destacada por los populares al situar junto al mar Mediterráneo el cierre de campaña matutino de su candidato gallego a la presidencia del Gobierno de España.

Regreso al sur

El líder nacional del PSOE romperá con este regreso al sur una sequía de dos meses y medio sin visitas a tierras andaluzas. Su última incursión tuvo lugar el 18 de junio, con la precampaña de las elecciones generales ya activada.

Igualmente, hay que remontarse a otra campaña electoral, la de los comicios locales del 28 de mayo, para encontrar sendos mítines de Pedro Sánchez celebrados en Sevilla y Jerez de la Frontera (Cádiz).

Seis semanas después de la cita nacional del 23J con las urnas y tras los resultados con los que ‘resistió’ el PSOE, Sánchez le ha concedido un tratamiento preferente a Málaga para escenificar que la apuesta del partido progresista por Andalucía no ha decaído como le afeaba el PP.