Empieza la demolición de Callejones del Perchel

Justo tres años después de que germinase la movilización de los vecinos de El Perchel por una salida "digna" del barrio en el que habían vivido toda la vida, hoy ha arrancado la demolición de la manzana.

La maquinaria pesada ha empezado a derruir las viviendas de la calle Huerto de la Madera, dejando una estampa agridulce, ya que aunque supone el adiós a la imagen de uno de los barrios más tradicionales y señeros de la ciudad, recuerda también el final feliz que han tenido los percheleros que allí vivían y que actualmente están reubicados.

Proyecto

La actual propietaria de la manzana es la promotora Dazia Capital, que proyecta una profunda transformación de este barrio con la constucción de cerca de 200 viviendas. De hecho, la Junta de Gobierno Local ya aprobó de forma inicial esta primavera un estudio de detalle para este desarrollo inmobiliario.

Derribo del último reducto del viejo Perchel

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Precisamente en la calle Huerto de la Madera este estudio de detalle propone la peatonalización de la vía y la ocupación del sótano para la creación de plazas de aparcamiento. Asimismo, contempla el desarrollo de tres manzanas de forma simultánea, según la información ofrecida por el Ayuntamiento de Málaga: la manzana 1 con 1.795,32 m2, la manzana 2 con 1.371,26 m2 y la manzana 3 con 507,77 m2 para la construcción de un total de 193 viviendas (104 viviendas en la manzana 1, 67 en la manzana 2 y 22 en la manzana 3) con una altura máxima permitida de planta baja más 5 y planta baja más 3.

"Sentimientos encontrados"

Para el perchelero Francisco Gutiérrez, histórico sindicalista de CCOO y ex Defensor del Ciudadano, que ha asesorado jurídicamente a las 52 familias que quedaban en los bloques de Callejones del Perchel, la demolición que se inicia hoy provoca que los vecinos "tengan sentimientos encontrados: por un lado, la nostalgia de gente de 70 años que ha nacido y se ha casado en el barrio, y lleva toda la vida viviendo aquí; por otro, la satisfacción de que se han marchado a una vivienda digna".

Como reconoció, cuando hace tres años se produjo la primera asamblea vecinal, no podían esperar que llegarían a un resultado tan satisfactorio, por lo que quiso resaltar "la receptividad y sensibilidad de la empresa -Dazia Capital-, que se ha portado magníficamente y debería ser un ejemplo para todas las grandes multinacionales".

En este sentido, precisó que de las 52 familias, 38 eran de renta nueva y según la ley, "se les había cumplido el contrato", aunque de forma tácita se renovara cada año.

 Sin embargo, las negociaciones con Dazia Capital permitieron que la inmensa mayoría que tenía renta nueva, en concreto 35, han podido salir con adjudicaciones de vivienda social, la mayoría en El Perchel y en La Trinidad.

De las otras tres restantes, dos recibieron una indemnización de 40.000 euros y una señora nonagenaria, una "renta vitalicia", para poder irse a vivir cerca de su hija, informó.

Con respecto a las 14 familias de renta antigua, Francisco Gutiérrez explicó que 12 de ellas lograron una indemnización de 170.000 euros, lo que les ha permitido comprarse una vivienda, y ya sólo permanecen dos vecinos de renta antigua en sendas viviendas, por la parte de calle Montalbán y calle Arco, que deberán negociar con la empresa y cuya permanencia no intercede en las obras actuales. Además, los seis locales comerciales que había en Callejones del Perchel también recibieron indemnización.

Francisco Gutiérrez informó por último de que la plataforma vecinal que coordinó las protestas y negociaciones ya se ha disuelto, "porque hemos cumplido el objetivo, y reiteró la "gran satisfacción" por el resultado, "porque la lucha estaba complicada, ya que la ley no estaba de parte de los vecinos".

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