Urbanismo

Adiós a las últimas casas del Bulto: una treintena de hogares serán desalojados

En el barrio aún prevalecen 31 casas de autoconstrucción que tendrán que ser demolidas para dar paso a una transformación urbanística que aún esta por concretar

Un tramo de la calle López Pinto, con las casas del Bulto y el edificio de la Gerencia de Urbanismo, al fondo.

Un tramo de la calle López Pinto, con las casas del Bulto y el edificio de la Gerencia de Urbanismo, al fondo. / A.V.

Ana I. Montañez

Ana I. Montañez

De la marginación a convertirse en suelo estratégico, ese es el viraje que ha dado el devenir del Bulto, el barrio de la Carretera de Cádiz conocido en el pasado por su carácter pesquero, pero también por las viviendas chabolistas y de autoconstrucción que han ido menguando con el tiempo aunque no han llegado a desaparecer. De hecho, aún quedan 31 hogares que deberán ser demolidos para dar paso a una transformación urbanística que aún está por concretar.

Estas viviendas se ubican, según indica el Área de Vivienda del Ayuntamiento de Málaga, en las calles López Pinto, Guadiela, Lázaro, Río Chanza, Río Gallo y Río Vasco. Estas infraviviendas, de pequeñas dimensiones, con tejados de chapa y rudimentarias construcciones, son el último vestigio que lleva años llamado a desaparecer para emprender la revitalización del barrio, sobre todo después de que en 2012 se demoliese el conocido "edificio de pescadores" para acometer el soterramiento del ferrocarril, una actuación que, pasada ya más de una década, aún no se ha producido.

En cualquier caso, el Ayuntamiento de Málaga está acelerando ahora en sus planes para emprender esa renovación del Bulto, sobre todo después de que una empresa inversora, Euro Andalucía Eventos SA -vinculada a Sierra Blanca, la promotora de uno de los tres rascacielos de Sacaba, las Málaga Towers-, haya mostrado su interés en desarrollar estos terrenos, que actualmente están en manos privadas.

Una imagen de las casas del Bulto.

Una imagen de las casas del Bulto. / Google Maps

Es más, no solo ha mostrado su interés sino que ha puesto una propuesta sobre la mesa en la Gerencia de Urbanismo, en la que incluye la construcción de una torre de 23 plantas de uso residencial, aunque esta puede no ser el diseño definitivo ya que la Gerencia de Urbanismo sacará a concurso público tanto la ordenación urbanística como su posterior gestión y ejecución, aplicando la novedosa figura del "agente urbanizador".

Derecho a realojo

Hay que recordar que este sector contempla la construcción de 179 viviendas libres y 82 VPO, estás últimas destinadas a realojar a aquellos vecinos del Bulto que "tengan derecho a realojo".

En amarillo, la zona incluida en el Plan de Reforma.

En amarillo, la zona incluida en la actuación del Bulto. / L.O.

El concejal de Vivienda, Francisco Pomares, ya aclaró que para poder tener derecho a realojo, las viviendas deberán estar legalizadas y que los residentes cuenten con las escrituras o documentación que acredite su propiedad. No obstante, insiste en que se estudiará cada caso y se buscará una salida habitacional para aquellos que no tengan derecho al realojo en las viviendas protegidas previstas, al estilo de lo que ocurrió en Callejones del Perchel.

El "boom" del Bulto

Urbanismo empleará por primera vez la figura del "agente urbanizador" en el barrio del Bulto para agilizar los cambios urbanísticos en esta zona, que se ha revalorizado considerablemente debido a los profundos cambios que se van a dar en la zona portuaria que tiene justo en frente.

Estos terrenos se corresponden con lo que se conoce como la Plataforma de San Andrés, que se encuentra ocupada en gran medida por unas grandes naves para el almacenaje de grano. El Ayuntamiento de Málaga ha adquirido recientemente esta parcela al Puerto por nueve millones de euros con la intención de construir el prometido Auditorio de la Música, para lo que ya cuenta con el apoyo de la Junta -falta Diputación, Estado e inversores privados-. Asimismo, este año arrancarán las obras de la marina deportiva de San Andrés, una nueva zona de embarque para barcos de poca eslora, donde se ubicará también una escuela de vela y una zona comercial al estilo de Puerto Banús, aunque de menor extensión.

Estos proyectos han provocado que todos los ojos se posen sobre el Bulto, un barrio que lleva años aguardando su necesaria revitalización, una actuación, por cierto, que seguirá condicionada por el aún pendiente soterramiento del ferrocarril.

Tracking Pixel Contents