¿Por qué los jabalíes pasean por las calles de Málaga? Estas son las causas y posibles soluciones

La aparición de un jabalí paseando por el río Guadalmedina, a la altura de La Goleta, hizo sonar de nuevo las alarmas. "Ya se están acostumbrando a venir a la ciudad”, cuenta Juan Antonio de Luque, veterinario especialista en el Colegio Oficial de Veterinarios. Las zonas adecuadas para la existencia de este animal silvestre en Málaga serían los Montes y la Serranía, pero cada vez es más frecuente encontrar a un jabalí o cerdolí -especie híbrida entre jabalí y cerdo vietnamita- en las calles de Málaga.

Esto se debe a que esta especie es capaz de adaptarse a cualquier hábitat para buscar alimento. "Se suponía que con las lluvias se iban a quedar más en el monte y que no bajarían a la ciudad, pero ya vienen incluso de día y no solo de noche”, afirma De Luque.

Esta especie no puede convivir con el ser humano

Conocer el motivo por los que estos animales deciden cambiar los bosques por las calles de la ciudad es una buena manera para solucionar este grave problema. Y hay una causa clara: la falta de alimento. Los jabalíes se han percatado que en la ciudad existe la comida fácil, ya sea porque los ciudadanos lo alimentan (acto irrespetuoso que debería de estar prohibido), o porque rebuscan en la basura y consiguen el alimento. De Luque también explica que están comiendo de las colonias felinas.

Estos animales son salvajes y, según explica el Colegio Oficial de Veterinarios, en ningún caso deben vivir con el ser humano en la ciudad. Estas especies pueden llegar a ocasionar problemas para la Salud Pública, ya que pueden transmitir enfermedades zoonóticas. Y por otro lado, causan accidentes y ataques a la ciudadanía y sus mascotas. 

Una piara de jabalíes, en la bajada de Gibralfaro

Medidas para solucionar las visitas de los jabalíes a la ciudad

A causa de la preocupante situación en Málaga con los jabalíes es necesaria la implementación de ciertas medidas. El Ayuntamiento de Málaga, a través del Área de Sostenibilidad Medioambiental, están trabajando en la ampliación de la red de abrevaderos antes de los cauces de arroyos, que suele ser el camino que utilizan para llegar a la ciudad. Los abrevaderos que ya están habilitados se encuentran en distintos puntos de Churriana, la cabecera del río Guadalmedina, Cerrado de Calderón, Toquero y Monte San Antón.

El Ayuntamiento de Málaga afirma además que está trabajando junto a la Junta de Andalucía, el Colegio de Veterinarios y colectivos animalistas para implantar más soluciones como, por ejemplo, la plantación de plantas herbáceas para que tengan más alimento; así como en la aplicación de medidas disuasorias para intentar alejarlos de zonas urbanas, como olores o sonidos que les incomoden. 

Según informa el Colegio Oficial de Veterinarios, es importante promover la educación ciudadana para que la población sea consciente de los problemas sanitarios que pueden ocasionar los jabalíes. Además, para que tengan el conocimiento de que alimentar a los jabalíes tanto en núcleos urbanos como en montes es erróneo.

El Colegio Oficial de Veterinarios propone varias medidas: instalar mobiliario urbano especial, por ejemplo, contenedores de basura antivuelco, eliminar papeleras de balancín, sustituir el césped por arbustos en las rotondas de las carreteras de la periferias de los municipios, entre otras, para así dificultar y limitar la obtención de alimento y agua por parte de estos animales. También es importante estudiar la viabilidad de la implementación de proyectos de esterilización en la población de jabalíes, delimitar las colonias y refugios felinos en la periferia de la ciudad. Si esas medidas no fueran suficientes se volvería a optar por medidas de control como la aplicación de un dardo narcotizante.

Uso del dardo narcotizante

El Ayuntamiento de Málaga ya dispone de la autorización por parte de la Delegación Territorial de Sostenibilidad y Medio Ambiente de Junta de Andalucía, para la adopción de medidas de control de daños de jabalíes y cerdos asilvestrados en determinadas zonas de dominio público hidráulico del término municipal.

Se usará el dardo narcotizante con la idea de dormir al animal para aplicarle así una eutanasia indolora y mediante supervisión veterinaria.  Según el Ayuntamiento de Málaga, así se podrá controlar a las especies exóticas invasoras que se encuentran en libertad en el medio natural, al constituir un riesgo real en el ecosistema, la ganadería, la agricultura y a la población, además de suponer un peligro de accidentes de tráfico. Con la aprobación de la autorización autonómica, el protocolo de actuación establece que la sedación sea la opción prioritaria salvo en aquellos casos concretos en los que exista un problema de seguridad para los profesionales que tienen que intervenir en estas actuaciones, que obligue a utilizar otra fórmula.