Crónicas de la ciudad

La calle Carretería y los árboles que se fueron a por tabaco

Algo más de un año después de que finalizaran las obras de la calle Carretería, ya hay una decena de alcorques vacíos. Los vecinos del Centro llevan desde noviembre pidiendo que se repongan.

Un tramo de calle Carretería con tres alcorques vacíos, ayer.

Un tramo de calle Carretería con tres alcorques vacíos, ayer. / A.V.

Alfonso Vázquez

Alfonso Vázquez

Ha pasado algo más de un año desde que finalizaron las obras de Carretería-Álamos, financiadas en su mayoría con fondos de la Unión Europea

La sensación es agridulce, porque todo lo que significa dinero europeo en el Centro de Málaga guarda estrecha relación con la estampida de los vecinos y, por tanto, con el fracaso de las políticas públicas de fijación de habitantes, como pasó con la rehabilitación del Centro. 

En este caso, se llevan a cabo cuando este ‘arco superior’ del casco antiguo es un desierto vecinal, como comprobaron -seguro que muchos sobrecogidos- miles de manifestantes en las dos movilizaciones a favor de la vivienda el año pasado.

Por eso, Carretería-Álamos es hoy una reluciente alfombra roja para los usuarios de pisos turísticos. Como saben, pese a que la prohibición de pisos turísticos en bloques sin entrada independiente lleva en vigor desde 1997, nuestro Ayuntamiento se ha tirado años considerando su propia norma municipal fuera de sus competencias.

Tan inexplicable postura ha sido un coladero para convertirnos en la Ciudad del Paraíso de los Turísticos y, por tanto, en sinónimo de turismo de segunda y muchos problemas de convivencia. 

Quedan, sin embargo, vecinos en el Centro que, como la aldea de Astérix, se resisten a que el barrio más antiguo de Málaga sea solo un entramado de cartón piedra para hacer caja; por eso, siguen muy de cerca todo tipo de obras en su barrio.

Alcorque vacío en calle Carretería, cerca de la plaza de San Pedro Alcántara, ayer.

Alcorque vacío en calle Carretería, cerca de la plaza de San Pedro Alcántara, ayer. / A.V.

La decena

Así, después de protestar porque el Consistorio hizo oídos sordos a la participación vecinal en el arreglo de las plazas de San Pedro Alcántara y el Teatro, ahora llevan desde finales de noviembre reclamándole en escritos que reponga los árboles que faltan en la calle Carretería.

Aunque en un principio las infografías anunciaban que se plantarían naranjos, finalmente el árbol elegido ha sido el viburnum, seguramente porque no suelta bolas naranjas al suelo.

Ayer, esta sección recorrió Carretería entera y aunque los vecinos, en su último escrito de mediados de enero, contabilizaban nueve árboles que se marcharon a por tabaco, ya son diez los que faltan de su puesto por diferentes causas, entre los números 37 y 92 de la vía. 

Y a la altura del número 77 se concentra el mayor número de ausentes: hay tres alcorques vacíos. Ahora que se acerca la primavera, ¿vendrá el recambio? 

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