Tormenta perfecta contra el crimen organizado en Málaga: 55 detenidos en un mes por tiroteos, secuestros, vuelcos y narcotráfico

El patio central de la Comisaría Provincial de Málaga ha sido hoy uno de los puntos más seguros de España. Bajo la atenta mirada de agentes armados con metralletas, la Policía Nacional ha exhibido un botín millonario formado por parte de las casi nueve toneladas de droga intervenida, de los que 170 kilos son cocaína y el resto hachís. También había un arsenal formado por 37 armas y munición suficiente para enterrarlas. La exposición sólo es la punta del iceberg de las siete investigaciones que este cuerpo ha desarrollado en la Costa del Sol en apenas un mes, una tormenta policial perfecta que ha permitido desmantelar otras tantas organizaciones con un balance provisional de 55 detenidos.

Estas actuaciones han sido presentadas en un acto por el subdelegado del Gobierno, Javier Salas, y el comisario principal y jefe provincial, Roberto Rodríguez. El primero habló del «golpe duro y certero», «el mayor de los últimos tiempos contra el crimen organizado de la Costa del Sol», y el segundo resumió las operaciones, que entre otras casas han esclarecido dos tentativas de asesinatos y un secuestro de cinco días que adelantó hace más de un año La Opinión.

«Me están torturando»

Ocurrió en octubre del año pasado. Un ciudadano marroquí fue raptado en el aparcamiento de un restaurante de la avenida Bulevar Príncipe Alfonso de Hohenlohe de Marbella. Durante su cautiverio, los autores lo golpearon y lo grabaron en un vídeo en el que la víctima suplica a los suyos que hagan lo que los captores piden porque lo estaban torturando. Finalmente, fue liberado cinco días después en Torre de Benagalbón (Rincón de la Victoria) y la Policía Nacional presume ahora de detener a diez ciudadanos franceses que operaban en la Costa del Sol acusados de secuestrarlo por encargo y lesiones.

Otro de los crímenes resueltos es el tiroteo de Benalmádena de diciembre de 2024. Dos suecos fueron atacados tras coger un VTC. Las víctimas fueron interceptadas en la calle Poseidón por otros hombres que iban en un coche con un subfusil y una pistola. Los objetivos, amenazados en su país por el crimen organizado, se salvaron saliendo del coche y arrojándose por un talud de 30 metros. Dos franceses han sido detenidos en Mijas Costa y Estepona por su presunta implicación en los hechos, interviniendo los investigadores hasta 21 armas de fuego que tenían almacenadas en la vivienda del segundo municipio.

En la operación Barbas han sido detenidas otras cinco personas, también francesas, y emitida una Orden Europea de Detención y Entrega a un sexto como presuntos autores de delitos de tráfico de drogas, falsificación documental, sustracción de vehículo a motor, tenencia ilícita de armas y pertenencia a organización criminal. A raíz de la operación Lobezno, las investigaciones desvelaron que dos de los miembros alquilaron una nave en Antequera con identidades falsas. A finales de mayo se supo que usaron ese inmueble para cargar una furgoneta con hachís. Tenía las placas dobladas y la carga quedó oculta en un furgón de alquiler con placas polacas que se dirigía a Madrid. Finalmente, fue interceptado por una patrulla en Jaén y, además de las detenciones, fueron decomisados 374 kilos de hachís. La Policía Nacional ha demostrado que los implicados en estas tres primeras operaciones pertenecían a una misma organización multidisciplinar dedicada a secuestros, ajustes de cuentas y tráfico de drogas.

La operación Bolero da por esclarecido el intento de homicidio en un supermercado de Málaga capital. Fue a plena luz del día en el aparcamiento del establecimiento ubicado en la calle San Salvador, en Cruz de Humilladero. Un hombre recibió dos tiros por parte de cinco individuos que querían sustraerle una bolsa llena de fajos de billetes. Entre los dos detenidos en Marbella y Málaga se encuentra el presunto autor material de los disparos, mientras que los otros tres están identificados y en busca y captura.

Vuelcos

La operación Kuni ha girado en torno a un grupo especializado en vuelcos, como se conocen los robos de droga entre narcos. La Udyco-Costa del Sol ha logrado la desarticulación de un grupo francés asentado en Estepona. La operación suma once registros en Marbella, Estepona y El Saucejo (Sevilla). Los investigadores detuvieron a nueve individuos por delitos de depósito de armas, tráfico de drogas, robo de vehículos, falsedad documental y pertenencia a organización criminal. Se han intervenido 14 armas, incluidos tres fusiles de asalto con su munición, y 600 kilos de hachís ocultos en una vivienda de Estepona. El comisario explicó que el grupo utilizaba para desplazar las armas de fuego un pequeño utilitario con un doble fondo a modo de «armero móvil» con el que pasaban desapercibidos y acudían a los lugares para llevar a cabo los vuelcos a narcotraficantes. Tras la labor investigativa, se concluyó que los detenidos acudían a realizar los vuelcos a la Costa del Sol, pero también en puntos de Cádiz, Sevilla y Madrid. Además de las armas, se han intervenido 2.515 kilos de hachís, 120.000 euros y 27 vehículos.

La Udyco-Costa del Sol y sus homólogos de Barcelona han logrado la incautación de 1.680 kilos de hachís y la detención de cinco personas localizadas en Cataluña en la operación Marisma. Esta ha permitido la desarticulación de una organización asentada en la provincia de Málaga cuya misión era almacenar grandes cantidades de cannabis en el Campo de Gibraltar para luego trasladarlo a Barcelona.

Zulos de droga en Campanillas

La operación Tomato tienen su epicentro en el barrio malagueño de Bailén-Miraflores. Los agentes constataron el elevado tránsito de compradores y movimientos y en los que el máximo investigado entregaba mochilas en las que se portaban hasta cinco kilos de cocaína. Posteriormente, centrados los agentes en conocer de dónde partía la droga, localizaron varias guarderías en la capital, incluidos dos zulos bajo tierra en una propiedad de Campanillas, en cuyo registro se incautaron de 170 kilos de cocaína, dos pistolas semiautomáticas y 129.515 euros. Este operativo suma nueve detenidos, entre ellos el líder en Ronda.

La operación Mosk se ha centrado en un grupo dedicado a transportar droga. Los miembros estaban asentados en Alhaurín el Grande y Cártama. Las vigilancias detectaron un inmueble en este último municipio del que se extraían fardos azules para ser introducidos en un todoterreno que iniciaba la marcha junto a una furgoneta y un turismo. En colaboración con Udyco-Granada, se interceptó los vehículos con 600 kilos de hachís en su interior y se detuvo a los tres implicados, a dos de los cuales se les imputó un delito contra la seguridad vial al carecer de carné de conducir, y a todas ellas delitos de tráfico de drogas, falsedad documental y pertenencia a grupo criminal. Dos entradas y registros en los municipios malagueños permitió intervenir 2.500 kilos de hachís y cuatro vehículos. A uno de los detenidos le constaba una OEDE de Francia por un delito de homicidio y agresión con lesiones graves.

Go Fast

La operación Chef ha desmantelado un grupo Go Fast, como se conoce el transporte de droga en vehículos a gran velocidad. Los investigadores detectaron una organización francesa que al menos había culminado cinco portes. Localizaron una nave industrial en Mollina donde guardaban los vehículos con los que posteriormente transportaban la droga. A finales de septiembre, los agentes presenciaron una importante carga de hachís en un paraje entre las Sierras de Grazalema y los Alcornocales. La actuación policial frustró el transporte previsto y logró detener la carga en Cijuela (Granada). La furgoneta llevaba 1.045 kilos de hachís. En cuatro registros fueron detenidas cuatro personas en Mollina, Mijas y Estepona. A finales del mes de octubre, se llevó a cabo la segunda fase de explotación con dos detenciones más y un registro en una finca en Churriana, en Málaga capital, donde se guardaban los vehículos empleados por la organización. Se intervinieron otros seis vehículos.