La globalización también tiene sus efectos negativos en el Puerto de Málaga. Un cambio de hábitos alimenticios en China está provocando una caída en los ingresos de la Autoridad Portuaria, que desde el último trimestre del año pasado empezó a recibir menos cantidad de cereales en sus muelles, uno de los tráficos más importantes y beneficiosos del Puerto.
El presidente de la Autoridad Portuaria, Enrique Linde, dio a conocer ayer el balance económico del Puerto durante el año pasado y puso de relieve cómo la buena marcha que llevaba desde hacía tres años se ralentizó durante el último trimestre. Apuntó al acusado descenso del tráfico de cereales como una de las causas. Durante 2007 se movieron medio millón menos de toneladas, situándose en 6,3 millones.
Linde afirmó que la gran demanda de China sobre el cereal ha desviado a este país los tráficos. Al mismo tiempo, el creciente uso del llamado biodiésel ha llevado a dedicar grandes extensiones de cultivo para este fin y no para el consumo, lo que reduce la cantidad de cereales transportados.
La reducción de este tráfico tiene un impacto directo en las cuentas del Puerto, ya que estos barcos son de los que más dinero dejan a la Autoridad Portuaria. Enrique Linde aseguró que durante el año pasado se consiguieron 836.000 euros de beneficio, cifra que ya han revisado a la baja para el presente ejercicio.
Petróleo. El tráfico de contenedores tampoco está para las alegrías de años anteriores. Pese a que en 2007 aumentó un 16%, no se llegó a la cifra de los 600.000 contenedores movidos como preveían. La causa radica en el aumento del precio del petróleo, que ha obligado a Maersk, que opera el muelle de contenedores de Málaga, a ajustar sus líneas y reducir la velocidad de sus barcos.
El crecimiento en este tráfico de contenedores se mantendrá para este año, según Linde, aunque ajustarán sus previsiones.
Pero las dudas no afectan al resto de tráficos del Puerto de Málaga, que experimentan crecimientos muy importantes. Los cruceros no sólo siguen batiendo marcas con sus 240 escalas y 292.000 turistas, sino que esperan alcanzar los 270 barcos y superar ampliamente los 300.000 visitantes con la nueva estación marítima.
Lo mismo pasa con el tráfico regular de personas, que aumentó un 22,3% gracias a la nueva línea entre Málaga y Alhucemas, con dos barcos semanales.
Uno de los tráficos con más futuro del Puerto de Málaga es el referido a los coches, con 36.214 vehículos traídos en barco a Málaga para su distribución. Esto supone duplicar las cifras de 2006, con previsión de que se mantenga la línea ascendente al ser la puerta de entrada para la distribución de coches para el sur de la Península.
