De los nueve años que lleva en el Málaga, los dos primeros fueron los más duros para Francesc Arnau (Las Planas, Girona, 23/05/1975), ya que sólo disputó tres partidos, siempre a la sombra del internacional Koke Contreras.

El jugador más veterano del Málaga CF, que cumplirá 35 años dentro de dos semanas, será el debutante más atípico de la presente campaña en Primera División. Pese a ser el capitán del equipo y al mismo tiempo el futbolista albiceleste con mayor experiencia de todos los que integran la actual plantilla, ha tenido que esperar a la penúltima jornada del campeonato de Liga 2009/10 para ponerse los guantes en un partido oficial. Será mañana sábado, a partir de las nueve de la noche, en el Coliseo Alfonso Pérez Muñoz de Getafe.

Y volverá a disputar un encuentro liguero once meses después, ya que la última vez que tuvo la ocasión de vestir la elástica del Málaga fue en la última jornada de la pasada temporada, cuando el conjunto dirigido por Antonio Tapia cerró el campeonato en el estadio Cornellá-El Prat de Barcelona (3-0). Fue el 31 de mayo de 2009 frente al Espanyol, precisamente el rival contra el que debutó como malaguista en la Liga 02/03.

Casi un año después de su última intervención (8 de mayo de 2010), Arnau tendrá la oportunidad de volver a enfundarse la camiseta malaguista y la misión de dejar la portería a cero, ya que con ello habrá muchas posibilidades de que el Málaga consiga la permanencia en la máxima categoría por segundo año consecutivo.

Un año más

El guardameta gerundense, que concluye su relación contractual con el Málaga el 30 de junio de 2011 y que ha expresado públicamente en más de una ocasión que quiere colgar los guantes en el club de Martiricos, tiene ante sí uno de los retos más apasionantes de su carrera deportiva, después de una temporada totalmente ´en blanco´.

"Ahora no toca jugar, pero nunca se sabe", manifestó en la entrevista-chat que concedió a los lectores de ´laopiniondemalaga.es´ el pasado 22 de enero.

Y es que Arnau, por su carácter y su forma de ser, es de esos jugadores que nunca pierden la fe, que son capaces de vivir en el ostracismo años enteros sin que se resienta su entrega, su sacrificio, su esperanza y su ilusión.

Ahora le ha llegado la hora, tras la quinta amarilla que vio anteayer Gustavo Munúa contra el Athletic de Bilbao en San Mamés y que obligará al cancerbero uruguayo a perderse un partido por acumulación de amonestaciones.

El Málaga va a presentar alegaciones al acta arbitral de Rubinos Pérez, que señaló que el charrúa recibió la tarjeta "por discutir con un contrario (Toquero) sin llegar al insulto ni a la amenaza". Hoy se reunirán tanto el Comité de Competición como el de Apelación. E incluso el de Disciplina Deportiva, salvo que haya excesivo trabajo y lo deje para mañana por la mañana.

Será, si no prosperan las alegaciones del Málaga CF, el partido número 118 de Arnau en Primera División –el 94 con el Málaga–.

Desde aquel 9 de noviembre de 1996, cuando debutó con el Barcelona ante el Atlético de Madrid en el Camp Nou (3-3), han pasado trece temporadas.

Jugador 31 de este curso

Arnau será, además, el trigésimo primer jugador que dispute algún minuto esta temporada en el Málaga 2009/10. La avalancha de canteranos da paso ahora a la veteranía del portero. Juan Ramón Muñiz, que suele señalar que le da la misma importancia al que juega los 90 minutos que al que sólo actúa en los últimos instantes de un choque o en encuentros concretos, resaltó tras el choque en La Catedral la importancia que tienen en este tipo de envites los jugadores menos habituales. Entre ellos, Arnau. Ha llegado su hora.