El luso lleva en una espinillera la imagen de un amigo que se dejó la vida en un campo de fútbol: Antonio Puerta. El canterano del Sevilla se desvaneció en un encuentro en el Sánchez Pizjuán entre los hispalenses y el Getafe, un 26 de agosto de 2007.

Murió a los dos días en el hospital Virgen del Rocío. Duda, en aquella época, jugaba en el Sevilla, y los dos mantenían una magnífica relación. El sevillano, de sólo 22 años, hizo muy buenas migas con Duda, que afrontaba su segunda y última temporada en el Sevilla, antes de regresar a Málaga, en la 2008/09. Tras su desgraciada pérdida, Duda decidió jugar el siguiente partido con una imagen suya, en la que se incluye un escudo del Sevilla, en una de sus espinilleras. Y jamás ha perdido esa tradición.

Las imágenes de la televisión del Málaga CF mostraron ese detalle en la previa del Racing-Málaga.