El dueño y presidente del Málaga Club de Fútbol, el jeque catarí Abdullah Bin Nasser Al Thani ha decidido por fin tirar la casa por la ventana para convertir al conjunto malaguista en uno de los grandes del fútbol español y europeo. No es que hasta ahora no haya invertido dinero en el club, pero después de lo sucedido en la campaña anterior, en la cual el equipo sufrió hasta el final para mantenerse en Primera División, el jeque no piensa escatimar gastos para que el Málaga sea uno de los animadores de una Liga que en los últimos años está resultando muy monótona por el dominio cada vez más aplastante del dúo Barça-Madrid.

Con el fin de cumplir ese ambicioso objetivo, el jeque está realizando una serie de fichajes muy ilusionantes, ya que se trata de jugadores con una calidad y experiencia de sobra contrastadas. En realidad, estos ilusionantes fichajes ya empezaron a hacerse en el pasado mercado invernal cuando el equipo se encontraba en puestos de descenso y Manuel Pellegrini acababa de aterrizar en el banquillo; por aquel entonces llegaron a Málaga jugadores contrastados como Baptista, Maresca y Demichelis, los cuales dieron un gran salto de calidad al equipo que se reflejó en su espectacular final de Liga. Pero, para la nueva temporada que se avecina, el jeque no quiere más sustos y está reforzando a conciencia el plantel malaguista desde el principio para conseguir objetivos mucho más ambiciosos que la simple permanencia en la categoría.

Los fichajes de cara a la próxima temporada, como señalé anteriormente, son todos jugadores bastante contrastados. El primero de ellos es el veterano holandés Ruud van Nistelrooy, que es un delantero de renombre internacional y todo un consumado goleador, como ya demostró en el Manchester United y en el Real Madrid, donde se convirtió en uno de los máximos goleadores de la historia de la Champions League.

El siguiente fichaje, el navarro Nacho Monreal, es uno de los laterales zurdos con mayor proyección del fútbol español y, pese a su juventud, tiene ya larga experiencia en Primera División y el seleccionador Vicente del Bosque cuenta con él para sustituir al veterano Capdevila. El tercer refuerzo, el holandés Joris Mathijsen, es un central muy experimentado y bastante contundente, como demostró en la pasada final del Mundial de Sudáfrica ante nuestra selección.

El siguiente en fichar, el francés Jeremy Toulalan, es un medio de corte defensivo, un auténtico líder dentro del campo, y que también goza de renombre internacional por su trayectoria en el Olympique de Lyon, donde ha ganado tres Ligas y ha jugado asiduamente en la Champions League. Poco después aterrizó en Málaga el portuense Joaquín Sánchez; este carismático jugador garantiza experiencia para la plantilla y calidad para la banda derecha. Y, por último, el club de Martiricos ha cerrado el fichaje del aún joven central catalán Sergio Sánchez, que, una vez recuperado de su lesión de corazón, arde en deseos de volver a ser el que fue: uno de los defensas más prometedores de nuestro fútbol. Y finalmente, Isco, un prometedor centrocampista que procede del Valencia.

A estos siete fichajes hay que sumarles un posible fichaje «bomba» y la incorporación de la joven promesa argentina Diego Buonanotte, un mediapunta de gran calidad técnica del que se espera mucho y que fue fichado en enero pero ha permanecido desde entonces cedido en River Plate, su club de origen.

Si Manuel Pellegrini conjunta bien estas ocho incorporaciones con los jugadores ya existentes en la plantilla, el Málaga puede llegar a ser un más que serio aspirante a los puestos que dan acceso a la Europa League e incluso, por qué no, a los puestos de Champions.