Ocho rivales y 15 puntos por disputarse. A falta de cinco jornadas, la lucha por entrar en Europa está en un puño. Nadie, exceptuando a los inalcanzables Real Madrid y Barcelona, tiene asegurada su presencia en una competición continental -salvo el Athletic en la Europa League por su condición de finalista en la Copa del Rey-, pero tampoco hay muchos equipos que estén ajenos a la lucha por el premio europeo. Será una encarnizada batalla por alcanzar las cuatro posiciones en juego entre nueve equipos en liza.

En menos de un mes, el «pescao estará vendido». El malaguismo conocerá si debe y puede hacer planes para el verano o si, por contra, sólo deberá estar pendiente del mercado de fichajes. Hay mucho en juego, algunos clubes incluso tienen hipotecado parte de sus presupuestos por la disputa de competición europea, pero lo único cierto es que hay cinco fechas donde todo se decidirá por pequeños detalles.

Y es que sólo siete puntos separan al Valencia, que es el tercer clasificado, de un nutrido grupo de equipos que están con 45 puntos y que también aspiran a disputar la Liga Europa o la Liga de Campeones. Es decir, dos partidos y medio. Casi lo mismo sucede con el Málaga, que ya le saca una renta de dos encuentros a un buen número de perseguidores, es decir, seis puntos.

Pero el calendario es caprichoso e impredecible. De hecho, lo que hoy parece complicado, con el paso de las jornadas puede parecer asequible, o viceversa. Así, el Málaga tiene, sobre el papel, uno de los finales de campeonato más complicados ya que se tiene que medir a tres de los rivales directos por la lucha europea, a un Barcelona sumido en plena carrera por ganar la Liga al Real Madrid y a un Sporting de Clemente que ya podría estar descendido en la última jornada y en el encuentro más inofensivo de todos, a priori.

Sin duda, los partidos contra los rivales directos serán decisivos para aclarar el panorama hasta el final. Así, esta próxima jornada el conjunto de Manuel Pellegrini visita Pamplona en la primera batalla seria que le resta. Los navarros, que son sextos, amenazan posiciones europeas pero aún se encuentran a cinco puntos del Málaga, por lo que la cuarta plaza no parece peligrar.

Una semana después será el decisivo y trascendental partido contra el Valencia en La Rosaleda. Mucho se está hablando y esperando el choque contra los valencianistas, pero si el Málaga no consigue llegar a la cita con opciones serias de asaltar o mantener la tercera plaza en la clasificación, la tensión será inferior.

Pocos días después y en una nueva jornada entre semana, el Málaga visitará el Camp Nou en un duelo desigual pero que puede dar pie a la sorpresa a tenor de los importantes compromisos en los que está envuelto el Barcelona. Ese mismo fin de semana, el equipo blanquiazul visitará El Calderón en otro duelo decisivo para la lucha europea ya que el Atlético de Madrid se encuentra ahora mismo noveno a seis puntos de los malaguistas y a la espera del fallo de alguno de los de cabeza.

La jornada final contra el Sporting puede y debe ser la mejor fiesta de despedida de un curso histórico para recordar, pase lo que pase de aquí al final. Aunque si no hay premio europeo, seguro que sabrá a poco después de rozarlo con las manos.

El calendario de los rivales. Mucho se puede especular también sobre si son positivos o negativos los calendarios de los rivales malaguistas implicados en la lucha por entrar en Europa. Sin embargo, y aunque sea sobre el papel, el Málaga sigue dependiendo de sí mismo para alcanzar el pase continental, un privilegio del que no todos pueden presumir.

Todos los implicados tienen la suerte o la desgracia de tener enfrentamientos directos de aquí al final de Liga. Sin ir más lejos, esta próxima jornada hay tres partidos de máxima igualdad con el Osasuna-Málaga, el Atlético de Madrid-Espanyol y el Sevilla-Levante. Por ello, estos encuentros serán de máxima rivalidad y para algunos serán seis puntos en juego. Y el Málaga es el que más enfrentamientos directos tendrá que jugar con tres de las cinco últimas jornadas. En total restan nueve enfrentamientos directos que servirán para aclarar más el futuro de la clasificación. Nueve finales que desatarán pasiones, sonrisas y lagrimas.

Además, sólo Sevilla, Málaga y Athletic se tendrán que ver las caras con alguno de los dos grandes de España. Los hispalenses visitarán el Bernabéu dentro de dos jornadas mientras que los blanquiazules estarán en el Camp Nou en la jornada entre semana, al igual que el Athletic, que recibirá al Madrid en San Mamés en la misma jornada.