Roque Santa Cruz ya está en Málaga. El delantero paraguayo, que la temporada pasada ya estuvo en el conjunto blanquiazul en calidad de cedido, ha aceptado la oferta malaguista, tal y como se apuntaba días atrás, y finalmente dio ayer el paso de acudir hasta la Costa del Sol para rubricar su nuevo contrato.

El internacional guaraní aterrizó en el aeropuerto malagueño a primera hora de la tarde de ayer. Disfrutó de Málaga y de sus alrededores como buen conocedor de la zona y luego se marchó a su casa para descansar, ya que le espera hoy otra apretada agenda. Estaba previsto que Roque pasará reconocimiento médico a primera hora de la mañana (9.00 horas) en la Clínica Rincón de los bajos de La Rosaleda, sin embargo fue cancelada a última hora. Eso sí, pasará por las oficinas para estampar su firma. Queda conocer si será un contrato por tres temporadas o por dos más una. Moayad Shatat ha llevado el peso de las negociaciones y ha terminado por convencer al delantero, que quedó libre tras finalizar su contrato con el Manchester City. Cabe la posibilidad de que Santa Cruz incluso se desplace a primera hora de la tarde hasta la estadía malaguista en Alemania para comenzar el trabajo de pretemporada a las órdenes de Bernd Schuster.

Pero se espera que no sea el único malaguista que haga acto de presencia mañana por La Rosaleda. Bobley Anderson está al caer tras firmar la semana pasada su contrato como nuevo jugador malaguista para las próximas cinco temporadas. De hecho se le esperaba para ayer martes en Málaga, pero retrasos burocráticos impidieron su desembarco. Hoy está previsto que pase el reconocimiento médico pertinente a primera hora de la mañana en la Clínica Rincón para dar por finiquitado su fichaje como jugador blanquiazul. Anderson, que sufrió la trágica muerte de su madre la semana pasada, quiere comenzar la actividad para superar el mal trago personal. Y su desembarco es inminente.

Ibrahim, al caer. El siguiente jugador que estaría al caer y con el que el club ha entablado conversaciones es Mohamed Ibrahim. El mediapunta del Zamalek egipcio podría recalar en el Málaga incluso antes de finalizar la semana. Los contactos han llegado a buen puerto y tras un esfuerzo del jugador, será malaguista esta próxima temporada.

El joven atacante, considerada una de las promesas del fútbol egipcio, concedió unas declaraciones a un web en las que afirmaba que había aceptado la oferta del Málaga CF, que recalará en el club blanquiazul, que había hecho un esfuerzo económico y que vendrá en calidad de cedido con una opción de compra de dos millones de euros.

Con la confirmación del propio jugador, su desembarco será más pronto que tarde en el conjunto blanquiazul. El Málaga pagará entre 400.000 y medio millón de euros por la cesión del joven egipcio al Zamalek y se espera que esté pronto a las órdenes de Bernd Schuster para comenzar el trabajo de grupo con el resto de sus compañeros.