­ No hace ni un mes y medio que cerró el mercado veraniego y el baile de nombres para el invernal ya parece haber comenzado. La veda se ha abierto en Portugal, donde Rodrigo Moreno, delantero del Benfica conocido en España por su paso por la sub´21, no está gozando del protagonismo esperado y lo colocan, a partir de enero, en el Málaga CF.

Rodrigo, de 22 años de edad, es un delantero centro que ha ganado todo el protagonismo en las categorías inferiores de la selección española. Pese a que nació en Río de Janeiro, ha desempeñado su carrera en España y últimamente en el país vecino. Zurdo y buen rematador, en el Benfica está encontrando complicaciones este año para tener protagonismo.

En lo que va de curso sólo ha jugado cuatro encuentros con sólo un tanto en su casillero. La competencia con Cardozo y el joven Markovic le ha relegado a un papel secundario. Y el técnico Jorge Jesús no le ha dado la confianza suficiente.

Rodrigo esperaba tener más protagonismo este curso, después de llegar el pasado verano con el campeonato de Europa de selecciones sub´21 bajo el brazo, donde también brilló el exmalaguista Isco Alarcón. Y comenzando su tercera temporada en el Benfica, el atacante esperaba hacerse con el puesto de titular.

Ante tantas adversidades, su salida podría producirse este mismo invierno. Sería en calidad de cedido y los medios lusos colocan al Málaga como una de las opciones principales. El conjunto blanquiazul, pese a que no disputa competición europea, sigue siendo un buen cartel internacional.

El Málaga cuenta con cuatro delanteros en su plantilla, aunque la aportación de Juanmi y Samu, hasta el momento, es sumamente reducida en cifras y minutos.

Por lo tanto, el peso del gol en el Málaga CF recae por el momento en Santa Cruz y El Hamdaoui. Schuster no ha apostado de inicio por dos delanteros, lo que le evita tener mayores problemas para buscar un revulsivo en la segunda parte. Pero no parece descabellado que pueda buscar una nueva cesión en invierno en caso de que la aportación ofensiva no ofrezca el rendimiento esperado. Aún así, el mercado no se abre hasta el 1 de enero.