El centrocampista argentino Pablo Pérez se convertirá hoy en nuevo futbolista del Málaga CF. El jugador de 28 años, que lleva ya dos días en nuestra ciudad, pasará a primera hora de la mañana los preceptivos controles médicos, al tiempo que sus agentes, en las oficinas de La Rosaleda, terminan de redactar el contrato que unirá a Pérez y al conjunto blanquiazul por lo que resta de temporada más otras tres campañas más. El Málaga CF abonará alrededor de un millón de euros al equipo en el que milita al jugador, Newell´s Old Boys, en varios pagos, y después de presentar diversos avales y garantías de pago que convencieron al equipo de Rosario.
Pérez se encuentra en un hotel de Málaga junto a su agente y será hoy nuevo jugador del Málaga a todos los efectos. Si no surgen problemas de última hora y se cumplen las palabras dadas en los primeros borradores de los contratos que ya se han cruzado ambas partes, Pablo Pérez será malaguista y el club tiene la intención de hacerlo oficial esta misma tarde, toda vez que ya se ha ordenado el pago de los 400.000 euros que se le debían a Martín Demichelis. Así que, además de cerrar su contratación, también se le podrá inscribir en la Liga de Fútbol Profesional, a expensas de que llegue el tránsfer internacional.
Pablo Pérez nació el 10 de agosto de 1985 en Rosario (Argentina) y dejó a un lado la opción de recalar en el Philadelphia Union, de la MLS de los Estados Unidos para afrontar su primera aventura en el fútbol europeo. A los 28 años cruza por primera vez el «Charco» y lo hace con la vitola de ser titular indiscutible y futbolista muy importante del Newell´s que, a las órdenes del «Tata» Martino, logró proclamarse campeón en el último torneo Final y semifinalista en la Copa Libertadores.
Titular durante el primer semestre del ciclo de Alfredo Berti - el recambio en el banquillo de Martino-, el mediocampista pone rumbo a Málaga y su club ultima ya la llegada de su recambio, Leonardo Ponzio, procedente de River, para ocupar su puesto.
La intención en Martiricos es que el futbolista reciba hoy el ok médico y poder anunciarlo esta tarde, con lo que su presentación podría ser hoy mismo o bien mañana al mediodía, dependiendo del papeleo, del caso Demichelis y de la firma de contratos. La intención es ésa, y que mañana mismo, tras el día de descanso de hoy, pueda ejercitarse con el equipo, a las órdenes de Bernd Schuster.
Su participación para el encuentro de este fin de semana es improbable, puesto que el jugador acaba de aterrizar, aún no conoce a sus compañeros, debe llegar el tránsfer y el club, además, debe dar de baja a un futbolista extracomunitario, puesto que la legislación sólo permite tres fichas y ya las ocupan el panameño Chen, el brasileño Weligton y el chileno Morales. Aunque los agentes de Pablo Pérez dicen tener opciones de lograr un pasaporte comunitario, estas cosas suelen tardar su tiempo y no hay demasiadas opciones en sólo unos días.
Además, la comisión creada por la Liga de Fútbol Profesional y y el sindicato de jugadores también debe recibir la comunicación del abono de la deuda que el Málaga tiene contraída con Martín Demichelis para que se permita la inscripción del argentino.
Lo positivo es que Schuster tiene una herramienta más dentro del equipo. No es un jugador que garantice goles ni un último pase prodigioso, que son las carencias más importantes del actual Málaga. Pablo Pérez es un centrocampista de brega, que tiene talento, aunque no es su mayor virtud, y que puede actuar en banda derecha (más echado al centro que en el extremo) o que puede acompañar en la medular a Camacho o Tissone, para fomar él pareja ofensiva e incluso el trivote que el alemán Schuster ya ha colocado en alguna ocasión.
El discípulo del «Tata» Martino, con quien fue titular indiscutible en el semifinalista americano con Newell´s, está loco por debutar. Hoy ya estará en La Rosaleda. Mañana ya trabajará a las órdenes de Schuster.
