No luce tatuaje ni pendientes, no lleva el pelo pintado, no se queja, se vacía en el campo y se le conoce sólo por su fútbol. Es Juanmi Jiménez, delantero del Málaga CF, canterano malaguista, héroe del Camp Nou y ahora disfrazado de «Pichichi». La madurez le ha llegado ya al joven delantero coíno a sus 21 años, tras explotar por fin su fútbol precoz.

Una de las resacas dulces desde el pasado sábado la está viviendo de manera especial Juanmi. El delantero blanquiazul, que desde el pasado mes de enero ya lleva el dorsal número «11» en su espalda tras dejar en el olvido el «26» que lo señalaba como jugador del filial, es ahora el hombre gol de Javi Gracia, el máximo realizador del conjunto blanquiazul tras sumar en el coso azulgrana su quinto tanto de la temporada.

Desde luego Juanmi se aprovecha de que no hay un goleador nato en el equipo, de ahí que su cifra realizadora sea la más elevada a estas alturas de Liga. Sin embargo, el camino del malagueño no sólo se escribe este curso, donde además debería de sumar otros dos tantos que le fueron «robados» a principio de curso al ser anulados por posiciones que luego se comprobaron que sí eran legales.

Juanmi aterrizó en el primer equipo de la mano de Juan Ramón Muñiz. Lo hizo cuando sólo tenía 15 años, pero con un olfato goleador en las categorías inferiores que le auguraban buena parte de lo que ya se está cumpliendo.

En enero de 2010, en una lluviosa noche en Getafe -precisamente el rival de esta jornada-, Juanmi salió en la segunda mitad en un partido de Copa del Rey que el Málaga tenía muy perdido, pero dejó su sello con el único gol del partido.

Poca continuidad más tuvo ese curso, con apariciones esporádicas. Pero el año siguiente, Jesualdo Ferreira apostó fuerte por él. Confió en su figura y lo situó de titular desde el inicio, algo con lo que correspondió Juanmi con un doblete en Zaragoza. Acabó ese curso con cuatro tantos, aunque con Pellegrini no dándole demasiado protagonismo.

Precisamente el chileno puso en jaque la carrera del delantero en el Málaga CF. Tuvo sus más y sus menos con el «Ingeniero» y en temporada y media apenas disputó siete partidos. Eso provocó su salida cedido al Racing de Santander, donde tampoco tuvo suerte, pero le sirvió para crecer.

Goleador compulsivo en las categorías inferiores de la selección, vivió una vida paralela con Paco Alcácer, en las filas del Valencia y ya internacional absoluto bajo la tutela de Vicente del Bosque. Ahora, tras el gol del Camp Nou, las estadísticas se han igualado con 20 partidos jugados este año cada uno y cinco goles.

Juanmi se ha asentado en el once de Javi Gracia. Trabaja y lucha como el primer defensor, pero ahora también marca como el mejor goleador. Está ya en sus mejores números goleadores y además se ha colado en el top 20 histórico de goleadores malaguistas en Primera, con 15 tantos en total y en la posición 18.