El galés Gareth Bale y el francés Karim Benzema no se entrenaron ayer junto a sus compañeros en la penúltima sesión del Real Madrid antes de enfrentarse el sábado al Málaga en el estadio Santiago Bernabéu, en partido de la trigésima segunda jornada de la Liga BBVA.
Justo cuando se cumple un año de que una galopada de Bale significase el título de la Copa del Rey contra el Barcelona, el galés, que disputó el partido de la Liga de Campeones ante el Atlético de Madrid tras recuperarse de una sobrecarga y un golpe en el pie izquierdo, trabajó en el interior de las instalaciones junto a Benzema, quien fue relevado por Isco Alarcón en el Vicente Calderón a los 76 minutos del «euroderbi» y son duda para recibir al Málaga.
El resto de la plantilla trabajó a las órdenes del italiano Carlo Ancelotti para seguir preparando el importante encuentro frente al conjunto blanquiazul, en el que no se puede permitir el Real Madrid un tropiezo tras haberse situado a dos puntos del Barcelona.
Según informó el club blanco, los porteros Casillas, Keylor Navas y Fernando Pacheco hicieron trabajo específico junto a Villiam Vecchi, y los jugadores de campo practicaron la circulación del balón con rondos y combinaciones de pases, para terminar con un partidillo con porterías pequeñas.
