El ascenso matemático del Real Betis a Primera División fue motivo de celebración ayer en las oficinas de Martiricos. Y es que, el regreso del conjunto verdiblanco a la máxima categoría del fútbol español reportará a las arcas del Málaga 1,5 millones, en concepto del fichaje de Francisco Portillo, de obligado cumplimiento si el Betis conseguía el ansiado ascenso.

Así las cosas, desde hoy el Málaga será un poquito menos pobre y recibirá ese kilo y medio que hoy por hoy se plantea vital para las arcas del club. Portillo, que ha sido clave en el logro del objetivo bético, fue cedido al conjunto de Heliópolis durante el pasado mercado invernal, pero el Málaga consiguió que la operación guardara una cláusula de compra de obligada ejecución en el caso de que el Betis subiera a Primera División. Con el ascenso ya conseguido, el media punta se desvinculará definitivamente del Málaga CF, equipo en el que ha crecido, para firmar un contrato por tres temporadas.

El Real Betis, gracias a su goleada por 3-0, vuelve a Primera División por la puerta grande, como campeón y a falta de dos jornadas para que concluya la competición, y para ello fue invitado de honor el Alcorcón, que solo pudo ver cómo los locales fueron superiores de principio a fin.

La formación sevillana, sabedora de que los resultados del Girona y el Sporting, sus perseguidores para el ascenso directo, no le habían favorecido, saltó al campo con la misión de ganar, lo único que le valía para ser desde ya equipo de Primera.