Este lunes se produjo un nuevo capitulo en la vida «tuitera» de la familia Al Thani que volvió a indignar al malaguismo. En este caso fue el hijo mediano del jeque, Nayef Al Thani, el que rompió su silencio en su cuenta personal de Twitter para lanzar dardos al malaguismo, incluso alguno que otro en tono de amenaza.

A primera hora de la tarde, Nayef se puso manos a la obra y arremetió contra todos aquellos que le han insultado tanto a él como a su familia en las últimas fechas debido a la gestión que están haciendo los propietarios cataríes de un tiempo a esta parte. «Esta es mi cuenta oficial de Twitter, si insultas a mi familia de alguna manera, verás qué puede pasarte a ti». Éste fue el saludo de buenas tardes del hijo y consejero de Al Thani a la afición malaguista y a aquellos que han utilizado las redes sociales para hacer llegar a su familia su disconformidad con los últimos acontecimientos en torno al club blanquiazul.

«¿Dónde estaba el Málaga en la 2007-2008? #piensaantesdehablar». Con ese comentario, que fue el que terminó de encender al malaguismo, prosiguió Nayef. Ahí fue cuando muchos ya no aguantaron e inundaron de menciones la cuenta personal del hijo del jeque (@NBA1311), recordando que el Málaga CF ya existía y estaba en Primera División antes de la llegada de la familia catarí a la entidad costasoleña. «Lo único que pensáis es ganar, ganar y ganar. Bueno, eso no es el fútbol. Sólo tienes que abrir los ojos y ver lo que le pasó al Málaga en cinco años, y piensas que vamos a parar. Para ser honestos, estoy muy orgulloso de mi padre por la construcción de un gran equipo», continuó Nayef a través de Twitter.

Quizás no sea el mejor momento para que el hijo del jeque siga calentando a los aficionados blanquiazules tras las últimas ventas, y en plena campaña de abonados, que no marcha demasiado bien.

En la última semana, el club blanquiazul vendió a los tres mejores jugadores de su cantera -Samuel, Samu Castillejo y Juanmi- y todavía no ha presentado ninguna cara nueva, pese a que hay tres nombres prácticamente cerrados, a falta de confirmación oficial.

Por lo que lo único que le hace falta a la parroquia blanquiazul para terminar de hartarse es tener al hijo mediano del jeque metiendo un poco más el dedo en la llega a través de las redes sociales.