El Memo Ochoa entra en escena. El meta malaguista juega esta madrugada del jueves al viernes en el primer partido de la selección de México en el torneo de la Concacaf, donde espera hacer un gran torneo para revalorizarse y así, quizás, encontrar un buen destino lejos de Málaga.

La México del Piojo Herrera está encuadrada en el Grupo C de la Copa Oro, que engloba a los clubes de Norteamérica y también de Centroamérica y el Caribe. La Tricolor se medirá en el primer duelo a Cuba, luego ante Guatemala y por último a Trinidad y Tobago. Un grupo sumamente asequible que servirá para revalorizar al meta que no ha tenido protagonismo en el Málaga CF.

México es una de las favoritas para alzarse con el título junto a Estados Unidos, que es la anfitriona. Ambas selecciones lucharán hasta el final, que se disputará el próximo 26 de julio. Por lo tanto, si México llega a la final como parece previsible, Ochoa no regresaría a Málaga hasta casi agosto, cuando el equipo está en plena gira sudamericana por Colombia y Uruguay.

Sin embargo, el futuro de Ochoa sigue siendo también una gran incógnita. Su continuidad en Málaga se ha vuelto casi insostenible tras sus declaraciones previas a la Copa Oro. El jugador busca una salida e incluso en el club le buscan sustituto.

Ha sonado en los últimos días el Toulouse francés e incluso se le ha vinculado con equipos griegos y turcos. Su pasaporte extracomunitario sigue siendo su pequeño escollo, pero el guardameta espera cuajar una gran Copa Oro, como el Mundial, para conseguir también un buen contrato en Europa.