Después de lo demostrado por el equipo de Javi Gracia a lo largo de los siete partidos de la gira veraniega, la afición malaguista rezuma ilusión y ganas de ver a los suyos en acción.
Oficialmente, el sábado concluyó la pretemporada del Málaga con la celebración del Trofeo Costa del Sol. El balance total del equipo de Martiricos se salda con cuatro victorias, dos derrotas y un empate, que finalmente terminó en derrota en la tanda de lanzamientos desde el punto de penalti. Con más goles a favor que en contra y una buena aclimatación de los nuevos fichajes, la sensación general de los seguidores de la entidad costasoleña es que la próxima temporada será buena.
Hay muchos que afirman que se echará bastante de menos a los futbolistas que este verano han cambiado la camiseta blanquiazul por la de otro equipo pero, a su vez, se muestran confiados en lo que las nuevas incorporaciones puedan aportar a la plantilla.
Olfato de Charles y Cop
El brasileño Charles ya conoce cómo se juega en La Liga. El delantero aterrizó en Málaga procedente del Celta de Vigo y avalado por casi una veintena de goles en su paso por el club gallego. Además, el ariete ya sabe lo que es trabajar a las órdenes de Javi Gracia, ya que coincidieron en el Pontevedra y la UD Almería.
El otro posible goleador del Málaga es Duje Cop, croata llegado del Cagliari en la Serie A. Quizá el sistema del conjunto italiano no favorecía a su estilo de juego, pero Cop demostró sus galones en los años que jugó en el Dinamo de Zagreb. Asimismo, lo poco que ha hecho en Málaga gusta a los aficionados. ¿Formarán estos dos jugadores la nueva dupla goleadora que necesita el Málaga?
Otra de las ilusiones cumplidas de los seguidores malaguistas ha sido mantener a Nordin Amrabat en el plantel costasoleño. Durante el verano se hicieron los transacciones pertinentes entre el Málaga y el Galatasaray para efectuar el traspaso total del jugador marroquí. Este año, además, Amrabat estrena dorsal, el número once, más acorde con su posición.
Permanencia casi asegurada
Esta temporada la afición respira tranquila. Si el año pasado por estas fechas había quien dudaba de la eficacia de Javi Gracia en el banquillo, puesto que llegó a Málaga tras descender a Osasuna, la buena dirección técnica del navarro durante la temporada pasada ha disipado todas las dudas sobre su trabajo.
Aunque el Málaga sea un club modesto y el principal objetivo de cara a la próxima campaña liguera sea mantenerse en Primera División, son muchos los aficionados que creen que esta marca se conseguirá, siempre y cuando jugadores y cuerpo técnico trabajen con el esfuerzo que les caracteriza.
La confianza de los aficionados es plena, solo queda esperar el debut liguero. Será el viernes de la próxima semana, ante el Sevilla.
