Estas dos semanas sin competición deben ser de reflexión malaguista, de penitencia para intentar purgar los pecados cometidos hasta la fecha. Pero Javi Gracia, en la vuelta al trabajo, se ha encontrado con un problema con el que ya contaba, pero que trastoca también en cierta medida su hoja de ruta para cerrar filas y afrontar la esperada recuperación.
Y es que hasta seis jugadores del primer equipo se han marchado estos días con sus respectivas selecciones. Hombres tan importantes como Carlos Kameni (Camerún), Roberto Rosales (Venezuela), Arthur Boka (Costa de Marfil) o Adnane Tighadouini (Marruecos), e incluso con un papel también secundario como Guillermo Ochoa (México) y Ricardo Horta (Portugal sub´21). El problema es considerable, ya que el técnico blanquiazul también cuenta en su plantilla con cinco jugadores lesionados -Amrabat, Camacho, Santa Cruz, Juanpi y Flavio-, además de Angeleri, que ayer no se ejercitó. Es decir, que el navarro cuenta con sólo trece jugadores aptos del primer equipo, con lo que la terapia de grupo es sólo para unos pocos.
Además, los que no están en Málaga afrontarán duros compromisos internacionales, ya que está en juego la clasificación para el Mundial. A diferencia de otras selecciones como casi todas las europeas, las africanas tienen una cita clave, al igual que en Sudamérica y Centroamérica.
Camerún, Marruecos y Costa de Marfil deberán superar una eliminatoria a doble partido donde todas ellas son favoritas contra Níger, Guinea Ecuatorial y Liberia respectivamente, pero donde tampoco se admiten fallos.
Venezuela se mide en esta ocasión a Bolivia y Ecuador. México recibe a El Salvador y visita Honduras. Y la Portugal sub´21 de Horta sigue su camino en la clasificación para el Europeo de la categoría.
