Incombustible Roberto Rosales. El jugador venezolano del Málaga CF todavía no se ha perdido ni un solo minuto en lo que va de Liga BBVA. El lateral derecho blanquiazul es el único jugador de campo de toda la competición, junto con Cristiano Ronaldo, que ha disputado absolutamente todos los segundos en lo que va de temporada, y ya van 28 jornadas (2.520 minutos, más descuentos).

Hasta el sábado, Rosales compartía este privilegio con Carlos Kameni, pero la lesión del camerunés, que ayer se confirmó como una rotura de menisco, ha dejado al internacional vinotinto como el único jugador blanquiazul «intocable» esta temporada. Los porteros Oblak (Atlético de Madrid), Areola (Villarreal) y Guaita (Getafe) son los otros tres jugadores de la Liga que no se han perdido ni un solo minuto, ya que, además de Kameni, el guardameta del Granada Andrés Fernández fue expulsado en los últimos minutos del Betis-Granada y se perdió sus primeros compases ligueros.

Desde que llegó la pasada campaña a la disciplina costasoleña, el defensa se ha hecho dueño y señor de la banda derecha blanquiazul y este año se ha reafirmado. La pasada temporada, Rosales estuvo presente en 34 de los 38 partidos de competición liguera, todos ellos desde el inicio, y, por el momento esta campaña, y a falta de solo 10 jornadas para concluir la Liga, Roberto Rosales ha sido titular en todos los encuentros ligueros y no ha sido sustituido en ninguno por Javi Gracia.

Sin duda, Rosales es un plus para el Málaga y para el técnico blanquiazul. Cualquier equipo pagaría por tener en su plantel un jugador titular con este nivel de compromiso y fiabilidad. Es difícil encontrar un defensa con tantos minutos a la espalda con solo tres amarillas a estas alturas de competición. Pese a ser un jugador que siempre va fuerte, al choque, a la verdad, su eficacia para frenar a sus rivales le hace destacar también en esta faceta. El venezolano lleva 12 jornadas consecutivas sin ser amonestado, no ve la amarilla desde la 16ª jornada frente al Atlético de Madrid en La Rosaleda. Las dos anteriores llegaron en la 13ª jornada, en casa frente al Granada, y en la 7ª en Mestalla. A este ritmo, Rosales está en condiciones de poder finalizar la Liga sin tener que cumplir sanción por ciclo de amonestaciones y así completar una Liga «inmaculada», si las lesiones lo respetan y Javi Gracia lo cree conveniente.

Rosales es un jugador vital para el equipo malagueño. Su profundidad por banda derecha le hace un hombre clave en el ataque blanquiazul partido tras partido. El incansable venezolano se recorre el costado diestro de arriba a abajo infinidad de veces por choque y desequilibra las defensas rivales. Su mayor defecto quizás es que cuando llega a posiciones delanteras en pocas ocasiones es capaz de poner un buen centro para los Charles, Cop y compañía. Pero si también tuviera eso seguramente ya no estaría en el Málaga CF. Aún así, ya ha aportado esta temporada cuatro pases directos de gol.

A pesar de que se haya fichado a otro lateral derecho en el mercado invernal, Cifu, su titularidad en la derecha sigue siendo incuestionable.

Además de todo esto, Rosales aporta al equipo una seguridad defensiva que en estas dos temporadas han hecho olvidar de un plumazo a Jesús Gámez, inquilino del lateral derecho en la mejor etapa en la historia del club.