No ha sido el mejor partido del Málaga CF ni tampoco el rival más complicado del verano, pero el conjunto blanquiazul volvió a demostrar que su preparación va por buen camino y que el caudal goleador esta temporada no se agota. Los de Juande Ramos superaron el amistoso contra el campeón de Arabia Saudí con solvencia, con buen juego por minutos y con algunos jugadores muy enchufados para el momento del curso en el que estamos.

Un triunfo sobre el Al-Ahli (3-1) que sirve para engrasar la maquinaria y para confirmar que el Málaga está haciendo los deberes mientras camina por tierra firme. Los tantos de Pablo, Charles y Kuki demuestran que hay variedad y facilidad goleadora, pero el tanto encajado también lanza un aviso a navegantes ya que los despistes en la zaga -que los hay- pueden costar caros en el futuro.

En nombres propios destacó Chory Castro, que en 30 minutos de gran inspiración liquidó el partido con sus dos asistencias y su lanzamiento al palo. Gran superioridad malaguista en la primera parte que se difuminó ligeramente con el carrusel de cambios, como suele ser habitual en este tipo de partidos.

Con todo, el encuentro arrancó con ritmo, lejos de los pastelosos partidos de pretemporada. Pronto el Málaga quiso dominar el balón y acorraló al conjunto saudí en su campo. Con acciones rápidas, juego por banda -sobre todo la izquierda- y movilidad de los delanteros, los de Juande mostraron sus credenciales.

En una falta lateral, fue Ricca el que no remató de cabeza a los pocos segundos del inicio. Sin embargo, el Al-Ahli no venía de comparsa y ya había demostrado ante otros conjuntos en esta pretemporada que podía oponer resistencia. Primero avisó Omar con una fala desde la frontal que estrelló en el palo de Aarón (minuto 6). Y pocos minutos después sería Muwashar el que se encontraría de nuevo con el meta malaguista en un mano a mano que adivió por bajo (20´). Pese al teórico dominio malaguista, las ocasiones corrían a cargo del conjunto saudí.

Pero entonces entró en juego el factor Chory Castro. El charrúa agarró la responsabilidad y se puso el mono de faena. Primero para superar a su marcador y asistir a Pablo para que marcara el primero de la tarde en un disparo raso llegando desde atrás (22´). Y luego para asistir el segundo dos minutos después a Charles, con una acción muy parecida y con remate a placer en el segundo palo del brasileño.

A partir de ahí el dominio malaguista fue total y las ocasiones se sucedieron. Duda, Charles, Michael Santos -quizás demasiado errático-, y sobre todo con el Choy como protagonista, que mandó un balón al palo en el minuto 36.

La segunda mitad sí arrancó con menos ritmo. El conjunto saudí cambió a todo su equipo y Juande Ramos fue moviendo el banquillo de manera escalonada, algo que resintió el ritmo del juego. Koné y Samu Casado saltaron de incio, mientras que Nesyri, Rosales, Ontiveros, Juankar, Juanpi y Kuki salieron a medio tiempo.

Charles, antes de marcharse pudo ampliar su cuenta goleadora, pero falló el mano a mano del que dispuso (58´). En el bando rival, poco peligro. Salvo un remate de Sarraj en una falta lateral que detuvo bien abajo Casado (64´).

Pero fue en un despiste cuando llegó el tanto visitante. Fue Ali Awaji en boca de gol tras una rápida contra (78´). Pero la respuesta blanquiazul no tardaría en llegar y dos minutos después Kuki volvía a abrir brecha de cabeza tras una gran internada de Ontiveros por la izquierda. Conexión del filial brillando en el primer equipo.

Trámite superado sin lesionados y ahora a mirar al Costa del Sol contra la Sampdoria, la gran puesta de largo ante la afición.