­ No hay mejor manera para arrancar el año que hacerlo rodeado de cariño y de mucha felicidad. Así lo inicia el Málaga CF, con una espectacular jornada de puertas abiertas en el Estadio de Atletismo que contó con la presencia de casi 3.000 aficionados blanquiazules en las gradas. Una demostración de malaguismo que endulza la vuelta al trabajo y que demuestra que esta afición nunca da la espalda a su plantilla.

La cita comenzaba a partir de las 18.00 horas, pero desde antes ya se hacía notar en el ambiente que era un día especial. Mucha chavalería deseando ver a sus ídolos y muchos aficionados ávidos de buenas noticias.

Poco después de la hora señalada saltaba la plantilla al césped del Estadio de Atletismo para comenzar el trabajo a las órdenes del nuevo míster. Un Gato Romero que salió el último acompañado de Weligton, y ambos se llevaron la ovación de la tarde.

El trabajo transcurrió sin sobresaltos, con vítores a los porteros y gritos a las nuevas estrellas. Sandro fue uno de los más buscados, pero el canario tardó en aparecer por un problema en el avión de regreso a Málaga.

Luego saltaron al césped los lesionados. Keko apura para reaparecer y también recibió el cariño malaguista.

Entre bambalinas se movían Martín Aguilar y Ben Barek; el director deportivo, Francesc Arnau; y el consejero de presidencia Carlos Pérez.

Luego hubo partidillo de la plantilla, goles y regalos para los aficionados. La plantilla firmó y lanzó balones a la grada. Sin duda, un día para recordar en la primera sesión del Málaga CF en este 2017.