El Málaga CF, con 21 puntos en las 19 primeras jornadas de Liga y con la mitad del trabajo hecho -las cuentas por la permanencia suelen rondar los 42 puntos, aunque este año apunta a que será más barata que de costumbre-, afronta este viernes en Pamplona el inicio de la segunda vuelta con muchos deberes por hacer y con una exigencia posiblemente mayor que en la primera. Un segundo tramo que obligará al conjunto blanquiazul a acabar con su mala racha fuera de casa -no gana desde el 19 de marzo pasado en el Benito Villamarín-, si no quiere pasar apuros en el tramo final del curso.
Y es que lo que resta de Liga requiere una exigencia importante para el conjunto de Marcelo Romero. Las primeras jornadas de Liga no son de una dificultad extrema, pero es sobre todo al final de curso cuando el conjunto blanquiazul recibirá en Martiricos a todos los equipos de mitad de tabla hacia arriba, con aspiraciones importantes como el título de Liga, entrar en Liga de Campeones o luchar por Europa.
A Martiricos llegarán en las seis últimas jornadas en casa rivales como Real Madrid, Barcelona, Sevilla, Atlético de Madrid, Celta y Valencia. Sin duda, un calendario complejo si el Málaga aún tiene deberes por hacer.
En esta segunda vuelta visitarán también Martiricos otros equipos más factibles de poder ganarles como Espanyol, Las Palmas, Betis o Alavés.
Visita a los cinco de abajo
Tampoco lo tendrá nada fácil el Málaga lejos de La Rosaleda. Y es que el equipo del Gato Romero deberá visitar el estadio de los cinco equipos que luchan por no decender y que están en las cinco últimas posiciones de la clasificación. Ambientes hostiles, nervios y máxima presión para visitar a equipos como Osasuna -este viernes-, Granada, Sporting, Leganés o Deportivo.
