La Rosaleda vuelve a vibrar con su Málaga. El conjunto blanquiazul se llevó el derbi andaluz endosando cuatro goles al Sevilla tras una segunda mitad donde fueron muy superiores a los de Sampaoli. Nueva remontada en Martiricos tras empezar por debajo con el gol del ´Mudo´ Vázquez -que también hizo el 2-2- en un tramo final de partido donde los goles de Llorente y Juankar pusieron patas arriba el estadio, dejando en silencio la esquina ocupada por los aficionados sevillanos.

El encuentro comenzó con la igualdad e intensidad digna de un derbi andaluz. Los visitantes acaparaban más la posesión del balón, sin embargo, el Málaga era capaz de asomarse con muy poco al área rival. Jony, al poco de empezar, ya tuvo la primera ocasión peligrosa, pero no pudo desbordar a Pareja en el mano a mano al borde del área. La tensión fue creciendo con el paso de los minutos y el conjunto hispalense, muy duro, comenzó a cargarse de amarillas. Poco a poco, los de Sampaoli se hacían con el centro del campo y volcaba el partido hacia la portería malagueña, y ahí fue cuando llegó el 0-1. Una contra rápida conducida por Vázquez llegaba a Ben Yedder, que devolvió el balón al centro para que fuera el propio ´Mudo´ Vázquez el que bajera a Kameni desde dentro del área tras golpear el balón en Luis Muñoz. El Sevilla golpeaba primero.

Pero lo bonito del fútbol muchas veces es lo impredecible que puede llegar. Cuando mejor estaba el Sevilla y amagaba con poner tierra de por medio, Correa no supo definir en el mano a mano ante Kameni con todo a placer y enviaba el balón por encima del larguero. Acto seguido, Fornals puso La Rosaleda patas arriba con un golazo desde la frontal que se coló por toda la escuadra de la portería defendida por Rico, que nada pudo hacer para evitar el empate. Corría el minuto 38 y el encuentro volvía a estar igualado. Poco más pasó en los minutos que quedaban y el choque llegaba empatado y con todo por decidir para la segunda mitad.

No decayó, ni mucho menos, el partido tras el descanso. El Sevilla intentó dominar en el inicio, pero al poco de empezar Sandro hizo el 2-1 que situaba por delante a los de casa. En un arranque de pura potencia dejó atrás a Pareja y batió por bajo a Rico. El encuentro se ponía de cara, no obstante, solo tardó 7 minutos el Sevilla en empatar. Error grave Luis Muñoz en el despeje, que dejó en bandeja el balón al atacante argentino para que volviera a igualar la contienda.

El partido podía caer de cualquier lado, sin embargo el Málaga creció y creció y se llevó el encuentro a base de coraje y corazón. En el minuto 77, Sandro ponía un centro perfecto y Llorente, más que reconciliado con La Rosaleda, batía con un gran cabezazo a Rico para poner de nuevo a los de Míchel en ventaja. Y, cuando el Sevilla ya buscaba el empate a la desesperada, Sandro provocó un penalti de Pareja para matar el choque. Él mismo lo tiró, él mismo lo erró, pero Juankar estuvo más rápido que nadie para sentenciar el partido.

Estallido de júbilo en La Rosaleda que vuelve a sonreír viendo jugar a los suyos y viendo como han sumado su quinta victoria en seis partidos y, además, en un derbi andaluz ante el eterno rival. El Málaga se ha colocado 12º con 42 puntos, quién lo iba a decir hacer poco más de un mes, y tiene la oportunidad el domingo de sobrepasar en la tabla al Celta, al que recibe en su feudo mientras los vigueses están más pendientes de su eliminatoria de Europa League frente al Manchester United.