El futuro de Diego Llorente en Málaga no está tan seguro como en un principio cabía esperar. El defensa madrileño, que ha estado cedido esta campaña en las filas blanquiazules por el Real Madrid, tiene varias «novias» de importante calado detrás de él y las pretensiones económicas que envuelven a la operación se escapan de la realidad que vive el Málaga CF. Es decir, que salvo que el conjunto blanco prolongue la cesión de Llorente un año más, la continuidad del zaguero está casi descartada.

Diego Llorente y el Málaga CF separaron sus caminos hace diez días con un apretón de manos y con el deseo de verse el próximo cinco de julio, cuando arranca la pretemporada blanquiazul. El zaguero había encontrado estabilidad y felicidad con la llegada de Míchel al banquillo malaguista y ambas partes habían llegado a un acuerdo para seguir en Martiricos una temporada más, siempre y cuando el Real Madrid diese el visto bueno a la operación.

Sin embargo, el rendimiento del final de curso del defensa hizo que también se revalorizase su figura y que varios equipos que estaban interesados en sus servicios terminasen por decantarse.

Hasta las oficinas de la Casa Blanca han llegado dos ofertas con gran interés por hacerse con los servicios de Llorente en forma de traspaso. La más potente es de la Real Sociedad, que estaría dispuesta a pagar hasta ocho millones de euros por sus servicios al club madridista. La propuesta es suculenta, aunque no es la única. Y es que el Villarreal también ha mostrado interés en el central tras desprenderse de Mateo Musacchio al AC Milan. Ambos clubes competirán el próximo curso en Europa y quieren al central como una de las piezas claves.

El Málaga, en ese juego económico no puede entrar y sólo aspira a prolongar la cesión de Diego una temporada más, además de haber convencido al jugador para que se decante por Málaga siempre que el escenario sea ese. Y con esa baza juega el conjunto blanquiazul, con la de esperar que la opinión del zaguero pueda tener peso en el desenlace de su futuro.

Las fuentes consultadas aseguran que el Real Madrid escuchará al jugador su opinión -que en principio es la de recalar en Málaga ya que conoce el club, la afición y el entrenador- y que obrará en consecuencia. No tiene el conjunto blanco problemas de liquidez y en Concha Espina tampoco quieren desprenderse sí o sí del defensa, en el que tienen depositadas esperanzas de futuro. De hecho, es un zaguero que han seguido de cerca y al que ya se le incluyó una cláusula para poder recuperarlo si sufría el equipo de Zidane lesiones graves.

En cualquier caso, todo tomará velocidad tras disputarse la final de la Liga de Campeones de este fin de semana en Cardiff. El escenario es complejo para que Llorente continúe, pero en Martiricos no arrojan la toalla.