Paul Baysse ya está lejos de Málaga tras tomar un vuelo pasado el mediodía de este miércoles. Lo ha hecho sin llegar a un acuerdo con el Málaga CFpara calibrar su estado físico. Una negociación que se ha dilatado y que no ha llegado a buen puerto, al menos por el momento. Y es que en el club no dan por descartado el fichaje, aunque la complejidad que envuelve a la negociación hacen tenerla en cuarentena a la espera de novedades en los próximos días.

Tal y como se apuntaba en la información de hoy, la jornada de este miércoles iba a ser clave para bien o para mal, aunque el jugador finalmente ha decidido regresar a su país pese a que en la jornada de ayer tenía pensado alargar su estancia en Málaga uno o dos días más. Un extremo que no ha sentado bien en el seno del club.

Según las fuentes consultadas por este medio, las exigencias del jugador y las negociaciones con sus agentes han impedido llegar al esperado acuerdo, pese a que la dirección deportiva y Míchel lo tenían como una de sus prioridades para reforzar la defensa.

Baysse, que tiene la carta de libertad tras acabar contrato con el Niza, también cuenta con más ofertas del fútbol francés -Olympique de Marsella- e incluso de Europa, con el Eibar como uno de los principales competidores del Málaga CF o el Bursaspor turco, que ofrecía más dinero. Ésa puede ser una de las claves para demorar el acuerdo.

Aún así, el jugador se ha llevado una grata impresión de Málaga y de sus instalaciones, lo que puede jugar a favor del conjunto blanquiazul. La respuesta definitiva de Baysse no debería demorarse demasiado, aunque en caso de ser una respuesta positiva deberá volver a Málaga para pasar el reconocimiento médico, requisito indispensable del club para firmar al jugador.