Michael Santos y Mikel Villanueva han iniciado la operación salida del Málaga CF, la que tanto trabajo ha costado poner en marcha y la que también aliviará elementos para Míchel en el primer equipo y masa salarial para Francesc Arnau.

El delantero uruguayo puso ayer rumbo a Gijón después de anunciar la noche anterior en sus perfiles de redes sociales que pasaba su última noche en Málaga. El charrúa sale en busca de minutos y lo hace en un recién descendido a Segunda División, con buen cartel, buena plaza y donde podrá intentar adaptarse al fútbol español.

Queda saber de manera definitiva si la cesión contempla opción de compra por parte del Sporting, aunque según apuntaban ayer desde Gijón no estaba incluida. Anoche al cierre de esta edición aún se ultimaban detalles del acuerdo, por lo que podría variar. Santos aterrizó en tierras asturianas pasadas las 20.00 horas y hoy pasará reconocimiento médico y completará su cesión.

El uruguayo fue una apuesta fuerte del Málaga CF el curso pasado pero no consiguió adaptarse a la competición. Ahora, en Gijón, quizás pueda encontrar los minutos que en el Málaga no iba a tener, ya que no ha participado en ningún partido de pretemporada. Además, con su salida librará una plaza de extracomunitario, lo que ayudará a ampliar el foco de acción para fichar al mediocentro y al delantero que faltan.

Por su parte, Mikel Villanueva sí completó ayer su salida a tierras gaditanas, aunque lo hizo con una novedad importante ya que antes de ser cedido al Cádiz renovó su contrato hasta el curso 2020.

Sin duda es un movimiento por parte del conjunto blanquiazul que respalda la confianza que tienen en la dirección deportiva sobre el venezolano, pero que también necesita crecer lejos de Málaga, donde sus opciones de jugar se ven reducidas.

Ahora las miradas se centran en darle salida a Koné y a Tighadouini. Ninguno de los dos entra en los planes de Míchel, como es de sobra conocido, pero la dirección deportiva no le encuentra destino por el momento. Una tarea, sin duda, complicada.