Míchel confía en su plantilla. Atrás quedan sensaciones contrapuestas en el verano y el técnico ya cierra filas conforme a sus jugadores. Así se volvió a expresar el técnico en una comparecencia en Madrid, donde la plantilla se encuentra concentrada estos días entre el partido contra el Atlético de Madrid y contra el Valencia. "Creo que si nuestra puesta en escena con algunas variantes es similar a la del Wanda nuestro resultado será bueno. Pero pase lo que pase en Valencia y en los próximos partidos, que entiendo que va a ser bueno, este equipo no va a pasar dificultades. Y no es un canto al sol, es que lo pienso sinceramente", dijo.

En primera instancia, Míchel fue cuestionado sobre el poco tiempo de recuperación para afrontar el partido de Mestalla. "En principio, cuando sólo tienes dos días de recuperación es difícil preparar un partido, porque tienes que recuperar a todos los jugadores e ir sobre lo que has trabajado previamente".

Además, habló sobre el estado en el que se encuentra Luis Hernández que recibió 18 puntos de sutura en la cabeza. "Luis tiene una brecha bastante importante porque le han dado más puntos por dentro que por fuera. Es muy llamativo pero tenemos que ver cómo está el jugador para jugar mañana. Si juega se abrirá. Si es por él jugará, pero veremos la situación", dijo sobre el zaguero, titular indiscutble.

El técnico habló sobre el rival. "El Valencia está ahora más a las alturas de las circunstancias. Se lo ponen difícil, el Levante se lo puso. La liga está muy ajustada. El Barcelona en Getafe también. Las diferencias entre el Valencia y nosotros existen pero esperamos que sea un partido igualado. Venimos de competir contra el Atlético y "sólo" nos ha ganado 1-0 e hicimos méritos para mucho más. El Valencia tiene un entrenador que tiene un gran carácter para remover el equipo y el ambiente", dijo.

"Cuando no hay puntos todo cuesta más. Con el mismo partido del otro día con otras circunstancias habríamos puntuado seguro o nos habríamos puesto por delante. Pero hay que contar con eso para que los jugadores no se vengan abajo. Si estuviéramos temerosos o venidos abajo no jugaríamos así. Vamos a seguir igual con la intención de puntuar", explicó sobre el estado anímico de sus jugadores.

Míchel también advierte movimiento en su equipo. "Ya hicimos rotaciones con respecto al partido del Atlético. Vamos a buscar soluciones en muchas parcelas y muchas situaciones por diferentes motivos. No nos podemos permitir mantener el mismo once porque no estamos en un buen momento y hay que buscar soluciones".

Sobre el trabajo anímico, Míchel fue claro. "Trabajo en ello tanto o más que el aspecto físico porque creo mucho en ello. Pusimos una buena puesta en escena. Tácticamente también. Pero psicológicamente hay un aspecto que no se puede controlar. Para mí eso es lo que reforzamos. Y que no piensen en el siguiente partido, porque sería una presión añadida que no beneficia. El partido que hay es el que viene. Tienen que creer en ello y eso lo hacen, no le podemos reprochar nada. Este equipo tiene un ejemplo de hace cinco meses".

"Me gustaría que tuviésemos más puntos porque nos daría tranquilidad. Todo ha ido modificándose. Pero es una labor del entrenador adaptarnos a las circunstancias. Mi plantilla es buena", reiteró el entrenador blanquiazul.

Míchel está convencido de que su equipo no pasará dificultades. "Hemos perdido cuatro partidos que podíamos haber conseguido puntos. A lo largo de mi vida deportiva, lo más importante es confiar en el trabajo. Yo me he jugado dos descenso con el Getafe en la última jornada. Y jugué la UEFA con el Getafe. La vida del entrenador medio pasa por altos y bajos. El año pasado cuando llegué mi mensaje era positivo porque yo desde fuera pensé que no íbamos a pasar dificultades. Y eso le dije a los jugadores. Y lo mismo lo digo hoy. Y lo mismo lo digo aunque haya otro entrenador a lo largo de la temporada. Porque el material humano es bueno y necesitamos tranquilidad".

El técnico también explicó la estadía en Madrid. "Lo hemos hecho cuando salió el calendario, en la semana de la selección, en un principio no lo teníamos previsto. No ha sido una decisión tomada por los malos resultados. Pensamos que si nos hubiésemos ido a Málaga no habríamos podido descansar casi. Cenemos juntos, estuvimos juntos. Lo hacemos por eso. Cuando los jugadores necesitan evadirse lo hacen y ahora necesitamos concentrarnos".